La Cofradía de Rianxo denuncia en el cuartel de Boiro un amplio vertido registrado en la ensenada

La Cofradía de Pescadores de Rianxo ha explotado ante un nuevo episodio de vertido de naturaleza industrial que se produjo a primera hora de la mañana del jueves en una zona de la ensenada e la ría arousana en la que dicho pósito tiene alguna autorización para marisqueo, concretamente en las inmediaciones de la playa de Agüeiros, cercana al embarcadero de Abanqueiro (Boiro). Hartos de comprobar como de forma periódica se registran este tipo de incidencias -al parecer hubo otro de similares características hace un par de semanas-, han dado el paso de acudir en la jornada de ayer hasta el cuartel boirense de la Guardia Civil para presentar una denuncia sobre los hechos, acompañada de imágenes de lo sucedido, y se investigue el origen del mismo y se tomen cartas en el asunto.
El patrón mayor rianxeiro, Miguel Ángel Iglesias, manifestó que las fotografías que tomaron de dicho vertido de color blanquecino que salía de un aliviadero o desagüe, que llegó a formar espuma y luego pasó a hacer “bolitas”,  hablan por si solas y que incluso se especifica el origen del mismo, precisando que no  resulta nada complicado determinarlo. Pese al monumental enfado que hay entre los profesionales del sector del mar de Rianxo que trabajan en ese y otros bancos marisqueros, no parece que su intención sea la de que se sancione al causante, sino que de una vez por todas se tomen medidas para que no se repitan unos hechos “tan lamentables” como estos. Los mariscadores rianxeiros consideran que estos vertidos  están detrás de la improductividad de ciertas áreas como la del referido arenal de Agüeiros, en el que ya no cría el bivalvo desde hace varios años, y que hay otras que lo hacen pero con dificultad y con una producción que es bastante baja. 
Iglesias manifestó que tuvo oportunidad de hablar con uno de los vigilantes del pósito rianxeiro que vio el vertido y que no tenía ninguna duda de que era de las mismas características que el que se detectó a finales de marzo pasado en parques de cultivo de Abanqueiro, como Punta Capitán  y Suquintáns, y que provocó la intervención del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de la comandancia de A Coruña, cuyos agentes realizaron una inspección y recogieron muestras para su análisis, pero de los que aún no trascendieron los resultados. l