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viernes | 19 abril | 2024
La Policía Autonómica imputó a 15 personas, en el marco de la Operación Estradas contra el furtivismo, desarrollada en Cabo de Cruz en la que fueron decomisados 113 kilos de almeja babosa.
Los agentes autonómicos desplegaron la operación para evitar el furtivismo en las playas de Cabo de Cruz, que dio como resultado la imputación de quince personas, 14 por un presunto delito de furtivismo y una por delito de receptación, ya que se encargaba de poner el marisco en el mercado a través de una depuradora de su propiedad.
Los policías que participaron en el operativo dieron cuenta ante la autoridad judicial y la Fiscalía de Medio Ambiente de la enorme actividad ilegal de los detenidos, alguno de los cuales fueron sorprendidos practicando el furtivismo hasta en 241 ocasiones en los últimos dos años.
En el informe destacan que las irregularidades demostradas van desde no respetar las mareas como se le exige a los mariscadores legales y no respetar las tallas de las extracciones ni el paro biológico.
El atestado policial fue remitido al Juzgado de Instrucción número 1 de Ribeira que es quien instruye ahora las diligencias de este caso de furtivismo.
Requisan pescado y marisco
Por otra parte, agentes del Servizo de Gardacostas de Galicia requisaron cerca de 1.300 kilos de pescado y marisco en dos controles realizados en Vigo. Uno de ellos se llevó a cabo en una cetárea en el mercado de O Berbés, donde los guardacostas identificaron a una persona y requisaron 294 kilos de buey, 434 de nécora, 214 de lumbrigante y 41 de cigala que carecían de documentación.
Además, los guardacostas y el Seprona de Vigo realizaron otro operativo en la rotonda de Guixar, donde inspeccionaron un vehículo isotermo que transportaba 108 kilos de raya, más de 30 de anguiacho, 5 de rodaballo, 10 de salmonete, 80 de merluza, 40 de sardina, 24 de rapante y 20 de lenguado. Los inspectores comisaron toda la mercancía, ya que carecía de documentación que amparase su legalidad e identificaron a una persona. La mercancía requisada en estos controles fue entregada al banco de alimentos, tras comprobar que cumplía con las garantías higiénico sanitarias para el consumo.
