RIVEIRA - La dueña de la casa que ardió en O Cochón escapó antes de alcanzarla una llamarada

La vecina de O Cochón que respondió a la llamada de auxilio de la propietaria de una vivienda unifamiliar que fue pasto de las llamas en la mañana del martes en esa zona de Riveira casi no fue capaz de dar crédito a lo que tuvo durante escasos segundos ante sus ojos. Esa mujer afirmó que nada más escuchar los gritos de Ramona Rodríguez levantó la vista y la vio alcanzar la barandilla de delante de la puerta de su casa, a la vez que una gran llamarada salía por la ventana de la sala en la que se originó el incendio, y que estuvo a punto de alcanzarla. La dueña de la casa ya se dio cuenta de la gravedad del suceso cuando, tras sentir el olor a humo y ver luego el fuego en un sofá, trató de apagar el fuego con el agua de un caldero y no lo consiguió, pues ya estaba muy avanzado. Fue entonces cuando decidió abandonar el inmueble.
Ramona Rodríguez logró salir hasta la entrada por sus propios, sin necesidad de las muletas que usaba habitualmente para desplazarse, pero cuando alcanzó la barandilla de la entrada de su casa precisó de la ayuda de la vecina que salió en su auxilio para poder alejarse lo más posible del lugar del incendio. Desde la distancia se la podía ver con horror como el fuego arrasaba su vivienda, además de presenciar la intervención de los Bomberos y el GAEM que lograron sofocar las llamas, aunque no pudieron evitar los graves daños que tanto el fuego, el humo y la alta temperatura causaron en la estructura del edificio que, tal y como ya se indicó ayer, quedó en pésimas condiciones de habitabilidad.
Según pudo saber este periódico, después de que muchos vecinos le ofrecieron cobijo mientras no encuentra otro hogar, la dueña de la casa afectada está viviendo con su hija. Los peritos del seguro que tenía contratado para la vivienda calcinada acudieron ayer a hacer una evaluación de los daños y parece ser que la compañía aseguradora se va a hacer cargo de la reconstrucción del inmueble. Al lugar también acudieron ayer por la mañana efectivos de las unidades científicas de las comisarías de Riveira y de A Coruña para continuar con las investigaciones iniciadas por un equipo de agentes a las pocas horas del incendio.
Aunque por el momento siguen sin esclarecerse las causas del incendio, los policías nacionales especializados en ese tipo de sucesos recogieron algunos restos de la casa arrasada por las llamas y de los que se puedan extraer indicios, como si hay acelerantes del fuego, entre otras cuestiones, que permitan aportar algo de luz sobre el suceso. Lo que parece estar claro que el punto donde comenzó el fuego fue en el punto donde se encontraba un sofá. Además, operarios de una empresa tapiaron ayer por la tarde la ventana que quedó destrozada por el fuego, así como los huecos de los cristales rotos de la puerta principal, que la Policía Nacional precintó para impedir el acceso a la vivienda.
Por otro lado, aún hay muchas dudas sobre el testimonio de la dueña de la casa sobre lo ocurrido momentos antes a varias personas, como Bomberos y policías. Además de posibles contradicciones en las que pudo incurrir entre lo contado a unos y otros, la falta de coincidencia entre las horas y el hecho de que ningún otro vecino vio a alguien pedir limosna por las casas del barrio es lo que le resta credibilidad. De todas formas, en próximos días, con la toma de declaraciones se podría aclarar algo este asunto. n