Una ariete voraz en el Arousana

Una ariete voraz en el Arousana
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“Tras romperme el ligamento cruzado de la pierna derecha empecé a golpear con la zurda, ahora soy ambidiestra”. Difícil para cualquier futbolista en edad formativa avanzada, pero no para Belén Fernández. La máxima goleadora del grupo I de Segunda Nacional con 28 goles a sus 19 años. Llegó al Atlético Arousana tras marcar 53 con el Portosín en Primera Autonómica con solo 14 años. En mayo de 2013 se lesionó de gravedad ante el Sárdoma en el último partido de liga de Segunda Nacional.  Seis meses después reapareció siendo todavía más voraz de cara a portería. En temporada y media hizo una treintena de dianas, pero no pudo evitar el descenso del equipo. Fichó en el Villestro, donde hizo una veintena de goles. Con la desaparición el club en verano y el ascenso del Arousana, volvió a Vilagarcía esta temporada, la de su consagración.  
Es la pichichi de la categoría con 3 tantos de ventaja sobre Eva, del Friol. Belén, natural de Bertamiráns, es la jugadora más determinante del equipo vilagarciano, que ha regresado a su hábitat natural por la puerta grande. A falta de dos partidos pelea por ser tercero. Y Belén por acabar pichichi. “¿Llegar a 30 goles? Espero superarlos” dice. “A mi me gusta ir a recibir el balón y girarme, pero el entrenador me insiste en que juegue fácil de cara”. Lleva tres hat-tricks y solo uno de penalti. Firma casi el 50% de los goles del equipo en liga. Cuando no ve puerta se siente impotente. “Me cabreo mucho, no lo puedo evitar, pero el entrenador me tranquiliza” explica. Tiene como referentes a Fernando Torres y a Tiago Alcántara. De sus compañeras se entiende muy bien sobre todos con dos. “Ari en mediocampo tiene mucha visión de juego, y Nuria me gusta mucho por su velocidad”. 
En los últimos años, Belén formó parte de las distintas selecciones españolas sub 15, sub 17 y sub 19. En esta última se quedó sin disputar un torneo oficial por una inoportuna lesión muscular. Es muy ambiciosa y piensa en dar el salto a Primera División. En verano rechazó una oferta del Santa Teresa de Badajoz por motivos de estudios. Pero esta vez será diferente. “Ahora estoy abierta a lo que venga a final de temporada”. Si no aparece nada de superior categoría que le convenza, las opciones de seguir en Vilagarcía son muchas. “Estoy muy contenta aquí, sobre todo con el entrenador que confía mucho en mí. Sería bonito pelear por el ascenso con el Arousana”.
La última vez que el equipo vilagarciano lo hizo, otra ariete con sus goles se mostró implacable. Fue hace una década y su nombre es Mari Paz Vilas. Palabras mayores. Belén espera hacerse su propio camino. De momento su única idea es marcar mañana en A Lomba, donde entrenó ayer con el equipo. Sus compañeras están encantadas con la ariete y quieren ayudarle a ser pichichi.

Una ariete voraz en el Arousana

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