O GROVE - El Gobierno local abandona el Pleno entre abucheos y peticiones de dimisión

El salón de plenos de O Grove resultó ayer insuficiente para albergar a las más de 500 personas que quisieron acudir a una sesión convocada exclusivamente para ampliar hasta el doce de enero el plazo de exposición pública del PXOM.
Los vecinos, situados incluso por detrás de los concejales y hacinados por las escaleras hasta la puerta de entrada del Concello proferían con  frecuencia gritos de “PXOM non” y rompieron en un estruendoso aplauso una vez que su portavoz concluyó de dar lectura al manifiesto en el que piden un documento urbanístico consensuado con los ciudadanos.
Al término de la sesión, al finlo de las 22 horas, los vecinos hicieron un pasillo que permitió a los miembros del Gobierno local abandonar el salón entre abucheos y gritos de dimisión. También se escuchó más de un insulto. Una señora, de edad avanzada, llegó incluso a arrojar tomates a los pies de los miembros del gobierno local, que intentaron tranquilizarla diciéndole que con esa actitud no conseguiría nada. “Pero así desafógome, ladróns”, les contestó la señora.
En la sesión de ayer intervivienron todos los portavoces con argumentos críticos a un Plan Xeral que tanto PSOE como BNG mostraron su desacuerdo durante su aprobación inicial
Sin embargo, ayer hubo un  nuevo punto de crítica que fue común a los tres: el viaje de Miguel Ángel Pérez a Buenos Aires en un momento en el que en O Grove se iniciaba la exposición pública del PXOM y la incertidumbre, la inseguridad y la falta de información crecía entre los vecinos.
En las intervenciones también hubo muchos reproroches y Ayda Filgueira se llevó la peor parte. José Antonio Cacabelos la definió como un fraude político por su apoyo a un documento que no defiende por igual los intereses particulares de todos, afirmaron desde el PSOE. Las intervenciones de Ayda Filgueira solo arrancaron burlas del público, pero también hubo descalificaciones para Fredi Bea, que trató de explicar que el Partido Galeguista Demócrata intentó hacer una primera reunión con los vecinos para hablar del PXOM sin que acudiese nadie. Igual suerte corrió un segundo intento hace nueve meses. Mientras hablaba, desde el público le respondían con un “o que hai é moito burro no goberno”.
La de ayer fue una sesión tensa, repleta de reproches y gritos en la que quedó patente que este segundo PXOM presentado por equipo de Miguel Pérez no convence a buena parte de la ciudadanía grovense y es que sumando los vecinos que se encontraban dentro del concello más los que se concentraron a las puertas del mismo, podrían ser más de mil las personas que ayer dejaron constancia de su disconformidad con este plan.