Al perjuicio económico se suman gastos y el comprometido futuro de las tierras

El perjuicio causado a los titulares de las fincas no se corresponde únicamente al valor de la madera que, en el caso de una familia con dos fincas puede superar tranquilamente los 10.000 euros. Los afectados deberán asumir ahora la obligada limpieza de la zona,  con la retirada de maleza y los restos de ramas y troncos que no se llevaron los autores de la tala ilegal. Lo exige la ley y si encuentran al culpable exigirán que asuma el coste.
Además, el autor o autores han podido causar daños que afecten a futuras producciones madereras porque, si bien los medios empleados solo pueden ser de los de un “fragueiro” –intermediario en la venta de madera entre productor e industria– las formas no se corresponden con un buen profesional. Por ejemplo, no cortaron el tronco de modo de la base puedan retoñar nuevos ejemplares o, por lo menos, con todas las garantías. Y es que de cada eucalipto talado pueden brotar hasta cuatro nuevos árboles.
En definitiva, estos propietarios de Silván de Armenteira han perdido un patrimonio que se mantenía casi como un colchón económico para una urgencia o un caso especial. Tanto es así, que en la parroquia era habitual talar unos eucaliptos para celebrar la boda de algún hijo o nieto de la familia. n l. r.

Al perjuicio económico se suman gastos y el comprometido futuro de las tierras

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