El PP de Ribadumia compareció ayer para hacer un balance de los cien primeros días de gestión del tripartito, que la portavoz popular, Salomé Peña, tildó de “gran decepción”.
La exalcaldesa centró su crítica en tres grandes ejes: La falta de iniciativa y gestión de los nuevos gobernantes, la realización, únicamente, de obras y proyectos iniciados por los populares y el “incumprimento de promesas”, como lo tocante a la transparencia.
Peña comenzó su exposición señalando la “deixadez” del ejecutivo, que se habría limitado a un “corta e pega” hasta en la elaboración del programa cultural del auditorio: “Acabo de velo e ata empregan as mesas fotos e tipo de letra”.
El capítulo de obras fue el principal ariete, acusando al tripartito de vivir del “legado de Salomé Peña e do PP, que sigue aumentando”, sacando adelante obras como la mejora del parque infantil, del entorno del Umia, la caldesa de biomasa para el colegio o la reforma del gimnasio, todas acciones encaminadas por los populares. Eso sí, dilatando los plazos y las obras porque, considera Peña, solo “tiveron présa para adxudicar os seus salarios”. Así, seguiría con retraso la ejecución de la mejora del colegio y la del edificio anexo al pabellón deportivo. En cuanto a las promesas “incumpridas”, encabeza los reproches la “falta de transparencia”, ya que “a día de hoxe non convocaron aínda ningún Pleno ordinario”, ni pasado actas de comisión de gobierno, ni abordado mociones de la oposición. Todo ello, añadieron, con “falta de cercanía aos veciños”, “porque o alcalde non está habitualmente e non se sabe cando chegará”.