Reportaje | No habrá nuevo curso escolar para la unitaria de Cobas de Lobos

Ahora sí es definitivo: la unitaria de Cobas de Lobos (Vilariño) echará el cierre y seguramente “nunca máis volva a abrir as súas portas, por moitos nenos que nazcan na zona”. Lo dice Mar Núñez, una de las madres más activas de esta comunidad de padres que hace años salieron a la calle pancarta en mano para reclamar su mantenimiento y la dotación de profesorado. Lo consiguieron, pero “xa era unha loita imposible, estaba claro que lle quedaba pouco”, añade la cambadesa, actualmente miembro de la ANPA del colegio Enrique Barreiro Piñeiro al que está adscrita esta escuela rural.
La baja natalidad sumada a la falta de algunos servicios como el comedor escolar o el Plan Madruga están detrás de la caída de la matrícula que ha propiciado la decisión. Sucedía lo mismo “arriba”, como dicen los padres para referirse al colegio del que depende. De hecho, el año pasado la Consellería de Educación suprimió una unidad de Infantil, pero también se puso en marcha el servicio de comidas para evitar esa huida de alumnos a centros de otras localidades como el de Barrantes (Ribadumia) o mismo de Cambados, como al Magariños, y parece que se está logrando. Núñez explica que las inscripciones iniciales fueron flojas, pero terminaron el curso mucho mejor y para el nuevo, que empezará en septiembre, ya pasan de los 30 niños. Por ello la ANPA contratará a un segundo monitor y el Concello mantiene su compromiso de asumir el coste de otro. Así las cosas, la matriculación parece haber revivido, con nuevas entradas en diferentes cursos. “A lo menos hai 11 novas matrículas”, calcula la vicepresidenta de la asociación de padres del Enrique Barreiro.
Este colegio asumirá a los niños de la unitaria y la decisión de cerrarla contó con el acuerdo de los padres. Más bien era la crónica de una muerte anunciada: “Xa sabiamos que este curso manteríase, pero non para o próximo”, añade Núñez con resignación. Y es que considera que una vez cierre sus puertas y por mucho que llegue a mejorar la natalidad, no habrá vuelta atrás y “é unha pena”.
Destino del inmueble
La situación también abre interrogantes sobre el destino de este inmueble, de titularidad municipal. De hecho, el concejal de Obras e Servizos, José Ramón Abal Varela, explica que el Concello le buscará un nuevo uso, pero todavía no hay ideas sobre la mesa, además de que será un asunto “a falar entre todos os compañeiros do goberno porque entran as competencias de varias concellerías”, añadió.
Con todo, parece previsible que las instalaciones continúen teniendo un destino social, es decir, que sirvan como local para los vecinos de la parroquia. En esta situación también está el edificio de la calle Rúa Nova, en el corazón de Cambados y ocupado hasta hace no mucho por la Mancomunidade. No obstante, en este caso lo tiene más claro y servirá para la asociación Zona Centro, la Plácido Castro y entidades juveniles, dejando más espacio en el de la calle Ourense. l