Un cortocircuito pudo haber sido la causa que ayer por la tarde provocó el incendio de un coche, cuando estaba estacionado en el bajo del edificio situado en el número 52 de la Avenida de Madrid.
El fuego en el interior del vehículo, que afectó sobre todo su parte trasera, movilizó inmediatamente a los servicios de emerxencia, que sofocaron las llamas en escasos minutos, ante la espectación de numerosos ciudadanos que pudieron contemplar de cerca cómo trabaja un dispositivo de emergencias.
Baltar
Espectación generó también un control rutinario desplegado por la Guardia Civil en la rotonda de Baltar. Seis coches patrulla, agentes ataviados con chalecos llamativos, y numerosos pinchos y cepos en el suelo hicieron pensar a más de un conductor que podría ser testigo de una redada. Sin embargo, fuentes de la Guardia Civil explicaron ayer que se trató de un simple “control rutinario aleatorio”.