Alrededor de un cetenar de piezas de bisutería formaban el “botín” con el que se encontró en la mañana de ayer un trabajador del Concello de O Grove cuando realizaba sus tareas de limpieza rutinarias en la playa de Mexilloeira. Recogió todos los objetos y los entregó a la Guardia Civil.
Otro pequeño incidente se produjo en las últimas horas en el paseo de Silgar, en Sanxenxo. El propietario de una panadería denunció que una o varias personas desconocidas le fracturaron la cristalera del local y sustrajeron del interior del mismo varios productos que tenía destinados a la venta.