ICdR, a través de su portavoz, Fernando Pérez, puso de manifiesto en el Pleno del pasado viernes las “reiteradas queixas” de los vecinos, especialmente de los mayores, porque “temos bancos públicos de deseño e moi, moi caros, pero ningún dispón de respaldo” y resultan “moi incómodos. Se refirió a los bancos de las Palmeras, que son de piedra, y a los de Mateo Sagasta y Dolores Mosquera, que “costaron “1.400 euros cada un”, pidiendo que se instale mobilario cómodo. n