“En Angrois las familias reaccionaban con rabia, tristeza e incluso culpabilidad”

“En Angrois las familias reaccionaban  con rabia, tristeza e incluso culpabilidad”
Diario de Arousa-2014-07-26-005-6e5fdf73

Emma Blanco fue una de las psicólogas que estuvo con la Cruz Roja en el operativo de acompañamiento a los familiares de las víctimas del Alvia (en Angrois). Un año después de lo sucedido esta vilagarciana recuerda vívidamente lo que ocurrió en el tanatorio provisional que se instaló en el Multiusos do Sar y donde acompañó a seis familias en uno de los peores tragos de su vida.

¿Cuándo supiste que ibas a colaborar como psicóloga en el siniestro del Alvia?
Pues yo soy voluntaria de la Cruz Roja y fue a través de esta entidad desde donde movilizaron medios de todo tipo, entre ellos a psicólogos como yo. Entré en la tarde del día 25, justo el día después del accidente, y me quedé hasta la madrugada del 25. Eran turnos de doce horas.

Y una vez allí...
Había dos enclaves. Uno en donde los familiares esperaban la lista de los fallecidos y otro el tanatorio, instalado en el Multiusos do Sar. Allí fue a donde me mandaron junto a otros compañeros. Nuestra función era acompañar a los familiares de las víctimas en todo el proceso... desde todos los trámites administrativos, recogida de los objetos personales e incluso ver a los cadáveres aquellos que querían.

¿Qué papel tiene un psicólogo en un accidente de esta magnitud?
Lo importante es provocar la ventilación de los sentimientos. Ante un suceso de este tipo la gente puede reaccionar de diferente manera. En lo de Angrois yo vi gente que reaccionaba con rabia, otra se quedaba helada, otra estaba triste... es importante escucharlos y mostrarles vías para que puedan salir adelante. Es un impacto muy fuerte que puede incluso derivar en fobias o pesadillas.

¿Cuánto tiempo puede tardar una persona en recuperarse de algo así?
El duelo generalmente dura un año, pero bien es cierto que a partir del tercer mes la persona tiene que empezar ya a reaccionar. La mayor parte necesita un apoyo psicológico a posteriori, todo depende de como sea la persona y como reaccione a lo sucedido.

¿Qué imagen se te quedó grabada de ese tiempo allí?
Lo recuerdo todo muy bien. Son momentos tremendos, de una tensión enorme. A los pocos días yo estaba helada. Nos juntaron a todos también para ver como nos encontrábamos. Con algunos de los familiares seguí proceso de seguimiento. Un trago así es terrible. Es muy difícil digerirlo todo y hay pérdidas que son horribles, como puede ser la de un hijo. Es nuestro trabajo intentar que la gente reconduzca su vida sin esas personas. n

“En Angrois las familias reaccionaban con rabia, tristeza e incluso culpabilidad”

Te puede interesar