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miércoles | 24 abril | 2024
Mariscadoras de la Agrupación de a pie de Carril sugerían hace unos días que la mortandad de la almeja en la zona de A Concha- Compostela alcanzaba ya el 90% y las playas eran ayer una evidencia de esta afirmación. Conchas y almejas muertas cubrían los arenales y el patrón mayor de Carril, Fernando Franco, no duda ya en hablar de “pérdidas millonarias”.
El sector nada puede hacer frente a lo que provoca esta elevada mortandad, causada por una baja salinidad. Franco apuntó ayer que el agua de Carril parece “agua dulce” y teme cómo pueda quedar la zona si continúan las tormentas. Estos temores no son infundados, puesto que el mal tiempo continúa este fin de semana y por el momento los expertos no ven visos de mejoría en una meteorología adversa que puede prolongarse durante semanas.
Muchas personas que ayer caminaban por el paseo marítimo se hicieron eco del estado en el que se encontraban los arenales, llenos de almeja muerta y de conchas. Pero esto es solo lo que el mar arrastra a tierra, ya que la próxima semana, apuntó el patrón mayor, se podrá comprobar exactamente cómo se encuentra la almeja, que ya dan prácticamente por perdida.
Además de cómo está afectando la intensa lluvia al producto, las mariscadoras sugerían en días pasados que también está influyendo la desembocadura del regato de A Tripeira, que también hace, incidían, una importante aportación de agua dulce a la zona.
Aunque la Agrupación de a pie no tiene pensado trabajar en la zona hasta primavera, constataron la elevada mortandad y no son nada optimistas. De hecho, el patrón mayor de Carril reconocía ayer que frente a estas circunstancias no pueden hacer nada más que “mirar para adelante y volver a sembrar” confiando en que el próximo año no se registre tan mal tiempo como en estos meses.
En todo caso hay que tener en cuenta que toda la almeja que ahora está llegando muerta a los arenales, más la que se encuentra en circunstancias similares y que quedará a la vista en los próximos días era precisamente la producción con la que contaban las mariscadoras para la campaña del verano.
Habrá que esperar a que se realice un balance definitivo sobre las consecuencias de la baja salinidad en las aguas de Carril, pero lo cierto es que ni las mariscadoras ni el patrón mayor son optimistas a este respecto.
Hay que recordar que aún el pasado lunes regresaron a la zona de trabajo de Os Lombos después de que a principios de año adoptasen la decisión de cerrar la zona precisamente por la riada registrada durante el mes de diciembre. Así, faenaron en A Fangueira, Os Lombos y Bamio y constataron que la zona está muy afectada por esa baja salinidad. Las mariscadoras están aprovechando para retirar el marisco muerto. Tras dos semanas de cierre, Os Lombos se encontraba igual que ahora se pueden ver los arenales, lleno de conchas y de almejas muertas.
Este proceso tendrán que repetirlo en A Concha-Compostela, donde la mortandad puede superar ya el 90%. Una cifra que supone un duro golpe para la economía de muchas familias de Carril, pero que no tiene solución al deberse al descenso de los niveles de salinidad causados por la constante lluvia que se ha registrado de forma continua desde las últimas Navidades. El sector está, por tanto, más que nunca pendiente de las previsiones meteorológicas.
