Los depuradores ven con “incertidume” la campaña de mejillón con Italia que dará comienzo en septiembre

Los depuradores ven con “incertidume” la campaña de mejillón con Italia que dará comienzo en septiembre
descarga de mejillón ayer en el puerto de vilanova g. salgado

En plena negociación con sus clientes de Italia, así se encuentran los depuradores gallegos en estos momentos. Sin embargo, el presidente de Agade, Ramón Blanco, no duda en asegurar que será “unha campaña complicada” marcada por los problemas económicos que atraviesa el país y por la falta de financiación bancaria. “O ano pasado xa foi difícil, pero este ano aínda máis. A verdade é que a vexo con incertidume”, asegura.
Y es que en estos momentos de crisis económica, los depuradores no quieren asumir ningún tipo de riesgo y mucho menos acumular impagos que podrían suponer la quiebra de un negocio. “Hai que asegurarse moi ben do que se vende e senón non facelo porque se non che poden garantizar o pago é como xogar á lotería”, dice Blanco. No es de extrañar que se planifique con celo la campaña de mejillón con Italia que dará comienzo la próxima semana. “É un país gran consumidor de mexillón, atópase plenamente integrado na súa dieta, pero se non o poden pagar pois ...”, advierte el presidente de Agade. Con distintos ojos se ve a Francia en el que las ventas del mejillón gallego sigue creciendo año a año y en el que la compra ha dejado de estar marcada por campañas. “Deixou de estar estacionalizado e véndese ao longo de todo o ano, pero tamén a situación económica do país é moi diferente”, señala Blanco.
En cuanto al mercado nacional, el sector depurador trabaja ya con total normalidad y con unos precios que varían muy poco de los de semanas anteriores. Así, el mejillón pequeño se vende a 0,50 euros, el normal a 0,70 euros y el grande a 0,90 euros. Un hecho que constata el presidente de Agade, Ramón Blanco, que señala “cinco céntimos arriba ou abaixo o mexillón mantén o prezo”. No es de extrañar que sean muchos los productores de mejillón que quieran vender el molusco en fresco, ya que en la industria los precios han comenzado ya a caer desde casi la apertura de polígonos en la Ría de Arousa. El nerviosismo por vender un producto que en muchos casos amenaza con caerse de las cuerdas está marcando por el momento las transacciones tras el viulento episodio tóxico.

Los depuradores ven con “incertidume” la campaña de mejillón con Italia que dará comienzo en septiembre

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