Una deuda de la anterior directiva mantiene embargadas las cuentas del Liceo

Una deuda de la directiva de Álvaro Paz mantiene embargadas las cuentas del Liceo Casino desde hace meses. Son un total de 73.000 euros los que se dejaron de pagar al Puerto de Vilagarcía en concepto de tasas por la concesión sobre la que la entidad iba a poner en marcha su nueva sede.
El proyecto, que echó abajo Alfonso Saavedra en sus últimos días como presidente, dejó este impago y a mediados del año pasado la Autoridad Portuaria recurrió a la Agencia Tributaria, que embargó las cuentas del Liceo, lo que complica enormemente la actividad de la entidad, que se esfuerza en saldar la deuda.
No es el único problema que acecha a la emblemática sociedad vilagarciana. Y es que este mismo mes tendrá lugar un juicio muy importante para el futuro económico del Liceo Casino, al que Abanca reclama 125.000 euros.
Los hechos se remontan a la etapa de Álvaro Paz, cuando se firmó un patrocinio para la vela. El Liceo considera que la entidad bancaria, que entonces era Caixa Galicia, no cumplió con las obligaciones derivadas de este acuerdo, que sin embargo no fueron puestas por escritas en un convenio.
El presidente del Liceo cuenta en su haber con numerosos correos electrónicos en los que se especifican dichas obligaciones, como la organización de eventos, y eso será lo que se aportará en el juicio.
Lo cierto es que mientras no se resuelva esta cuestión, el Liceo Casino se encuentra en la lista de morosos que utilizan los bancos, lo que impide a la entidad acceder a operaciones crediticias que podrían, por ejemplo, financiar proyectos como el de A Comboa.
La directiva de la sociedad afronta este difícil momento con una gestión que incluye recorte presupuestario y un freno en la sangría de bajas de socios.