La indignación del mar crece en Rianxo

La indignación del sector del mar creció ayer en Rianxo en un Auditorio lleno hasta la bandera. Rañeiros, parquistas, mariscadoras de a pie, políticos y patrones mayores volvieron a aliarse como ya hicieron hace una semana en A Illa. “O obxectivo estase a cumprir. A bola está medrando e vaia se está medrando”, comentaba un asistente a la cita.
Se volvió a hablar de una campaña de  libre marisqueo perdida y de medidas que ayuden a recuperar el recurso en los tres bancos marisqueros, pero también se habló de la Consellería do Mar y de su papel en esta “bola” que ya parece imparable. A los patrones ya no les vale el departamento de Rosa Quintana, piden al máximo responsable de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, del que hasta  ahora no han obtenido respuesta. 
Los asistentes a la reunión de ayer pidieron un paso más: Ir a Santiago a manifestarse. Pero los tiempos ya están marcados y la hoja de ruta diseñada minuciosamente por los patrones no apura los cartuchos. La próxima cita será en Cambados y para pergeñar su estrategia los responsables de los pósitos volverán a reunirse el próximo martes. No dejan nada a la imaginación y tampoco descartan “una nueva vuelta de tuerca”.
Por su parte la Consellería do Mar defiende su gestión y asegura que las medidas hasta ahora acordadas ya se han puesto en marcha. Volverán a convocar al sector, pero todavía no hay fecha y tampoco descarta buscar una salida airosa al descalabro en el libre marisqueo.
Mientras tanto Os Lombos siguen bajo mínimos, tanto que la posibilidad de que no se abran está sobre la mesa, a la espera de nuevos datos.
Ese revés, sumado a que la Administración achaca ahora el problema a la “sobreexplotación” del banco, y a que las medidas de regeneración prometidas se quedaban por debajo de sus expectativas, las cofradías decidieron dar un golpe de timón, modificar el rumbo, y acudir a sus socios para intentar forzar un cambio de ritmo en la Xunta. 
Esto parece ya imparable. Exigen medidas “contundentes e serias” y a los patrones el diálogo con Mar ya se le ha agotado.”Perdemos a confianza nela e así xa non se pode negociar nada. Levamos unano intentando e poñendo solucións sobre a mesa sen recibir nada a cambio. Nin sequera unha atención e un trato digno. Non nos poden tomar por tontos”, advierte el patrón carrilexo, José Luis Villanueva.
La rueda ya ha comenzado a girar. Cambados es el próximo punto de encuentro y allí se espera aumentar los autobuses fletados. Ayer fueron cuatro.