Mar reconoce incumplimientos del plan y apela al diálogo entre trueleiros y bateeiros

La Consellería do Mar reconoció ayer que se están detectando incumplimientos del plan experimental por parte de “uns poucos” trueleiros. De hecho, apeló al diálogo entre este sector y el bateeiro para solucionar el conflicto resurgido entre ambos porque “este é un conflito que afecta á relación entre dúas partes, non coas normas establecidas”. 
El departamento dirigido por Rosa Quintana emitió ayer un comunicado tras conocerse la interposición de una denuncia, ante la Guardia Civil y Capitanía Marítima, por parte de bateeiros de la Ría de Arousa y después de que tres embarcaciones de trueleiros abordasen a una lancha del servicio privado de vigilancia, según hicieron constar en su denuncia. 

"coñecen as autorizadas"
Para la Consellería do Mar se trata de un “conflicto” que deben resolver las partes implicadas. Y es que recordó que en el plan experimental de explotación del truel se establecieron claramente las bateas en las que pueden trabajar los camaroneros y en cuáles no. “Deben respectalo e coñecen perfectamente as autorizadas para desenvolver a súa actividade, posto que as que non, están debidamente identificadas”, añadió. Por tanto considera que existe un problema de comportamiento por parte de algunos marineros de ese sector porque “unha batea é unha propiedade privada que ocupa unha concesión de dominio público e sen unha autorización non pode traballar nela”. 
De hecho, Mar reconoció que se están detectando “incumprimentos” del plan por parte de “algúns trueleiros, uns poucos do total do colectivo, que non respectan a prohibición de traballar nalgunhas bateas nas que están provocando danos”. Es lo mismo que denuncian algunos mejilloneros, que incluso hablan de importantes pérdidas de la producción y más este año que, según alguno, el bivalvo “está especialmente frouxo e moi pouco suxeito á corda”. 

regulación adecuada
Así las cosas, Mar considera que el origen del problema no está en las normas establecidas, porque “regulan de xeito adecuado a actividade”, sino en su incumplimiento y, por tanto, “é un conflito que afecta á relación” entre ambos sectores. 
De este modo, la consellería apeló al diálogo y a la “responsabilidade” de todos los implicados para “evitar estas actuacións duns poucos, que perxudican a todos”. 
Mar también recordó que ya medió en este asunto y que, de hecho, de las tres reuniones mantenidas con trueleiros y dos con bateeiros, hace ahora dos años, nació ese plan experimental para el desarrollo de la captura de camarón en batea con truel y que establece “claramente” las bateas autorizadas.