La marea roja provoca pérdidas millonarias en el sector mejillonero

El sector mejillonero ya habla de una “crisis absoluta” a causa de la marea roja que ha provocado el cierre de la totalidad de los polígonos y de varias zonas de marisqueo. “No hemos vivido antes un episodio de estas dimensiones en la Ría de Arousa”, asegura Rosa Santorum, de Mejillones Nidal. Y es que los cocederos ya han destruido los kilos de vianda con la que trabajaron en la jornada previa al cierre,  a la espera de conocer los resultados de los análisis del mitilo con el que operaron en los días previos al cierre. Cocederos paralizados, depuradoras en las mismas condiciones, conserva a la expectativa y unos productores que se afanan en devolver al mar la mayor cantidad de producto posible para tratar de reducir unas pérdidas que, a falta de cuantificar, ya son millonarias. Solo ayer se descargaron en A Illa de Arousa al menos 15 trailers de mitilo de exportación, es decir, que estaba destinado al mercado de Italia y Francia.
Por el momento se habla de “pérdidas incalculables” y la indignación en el sector se incrementa a medida que estas van sumando. Los cocederos temen que el producto con el que trabajaron y que está en las cámaras a la espera de los resultados de los análisis, teniendo en cuenta que los laboratorios se encuentran desbordados, también tenga que ser destruido, a lo que suman la cantidad de kilos que devolvieron a los productores. Los productores, que no hacen más que insistir en que esta marea roja llega en el mejor momento del mitilo, asisten a la muerte de kilos de producto que no resiste el trajín de idas y venidas, por lo que un porcentaje tiene una muerte segura. Pérdidas de nuevo.
Pero el sector sabe que la presencia de toxina es un proceso natural, lo que no entiende es cómo no se ha detectado antes la presencia tan elevada de la diarreica. Ayer la indignación y el enfado era más que evidente y el sector señala a la Consellería do Mar, en concreto al Intecmar, como responsable del alcance y consecuencias que está teniendo este episodio.
Muchas voces lo apuntaban, pero ninguna tan clara como la de Rosa Santorum. Ella tiene claro que “hubo una falta de control, de previsión”. Ella tiene claro que “los análisis de las aguas no son costosos y no los hicieron”. Se lamenta de las “pérdidas económicas incalculables” y aventura que es posible que alguna empresa no pueda llegar a asumirlas. Para el sector, aseguró, “es un momento complicado”. Santorum tiene claro que “hay que exigir responsabilidades a quien las tenga”.
En la zona de O Barbanza también cuantifican por millones las pérdidas del cierre de las zonas de marisqueo. El pasado miércoles tuvieron que devolver al mar mucho marisco. El sector lo tiene claro y achaca las consecuencias de esta marea roja a “falta de precaución”.