Los petroglifos de Os Ballotes llevan siete años sin una actuación concreta

Un proyecto de 30.000 euros es la propuesta que está sobre la mesa desde hace ya unos años para poner en valor los petroglifos de Os Ballotes, en Bamio. En pleno proceso de recuperación de yacimientos arqueológicos en la comarca de O Salnés este ejemplo de arte rupestre ubicado en la boca de la Ría sigue sin contar con una partida concreta y específica. Los arqueólogos Iria López y Félix González apuntan que la última intervención en la zona (más que nada desde el punto de vista de limpieza) fue en el año 2009. Desde aquel entonces lo único que se hace en el entorno de este enclave de Bamio es limpiar la hierba una vez al año. La idea de solicitar una ayuda de la administración para acometer una actuación un poco mayor en el enclave se canalizó a través del Ateneo Mar de Arousa. “El proyecto básicamente consistía en la limpieza del sitio y también en acondicionar todo el entorno”, dice Iria López. Además también se demandan unos accesos mejores y también paneles indicativos que sirvan de reseña para los visitantes o turistas que acudan a la zona.
Lo cierto es que pese a que en la propia página del Concello de Vilagarcía figura “Os Ballotes” como uno de los puntos de visita obligada en materia de turismo en la capital arousana, la dejadez de la administración local en este sentido a lo largo de los últimos años ha sido notable.
“Muchos de los grabados no se ven ya por culpa de los líquenes y del musgo. Nuestro miedo se que alguien vaya allí y raspe con algo con la intención de ver los dibujos y que se acaben por destruir. Toda la zona requiere de una limpieza”, matizan los arqueólogos. “Os Ballotes” fue descubierto en los años 60 y hasta no hace mucho que se reconoció la titularidad municipal de la parcela en la que se asientan los principales elementos. “Hay otras aledañas de las que tampoco se sabe muy bien el propietario. Fueron trasmitiéndose de herencia en herencia”, señala Iria López.
Lo cierto es que ni siquiera desde el Concello, más allá de colocar y hacer referencia al yacimiento en la página web municipal, se hace promoción de la zona. La única actividad que se desarrolla en el entorno cada verano es la promovida por el Ateneo Mar de Arousa con visitas guiadas por la noche en las que se explica la historia y los condicionantes del lugar y que edición tras edición cuenta con un gran éxito de participación. “Una cuestión tan sencilla como colocar paneles que expliquen lo que hay o incluso una recomendación en la web que hable de qué momento del día es el mejor para ir a ver los petroglifos ni siquiera se hace”, dicen los arqueólogos.
“Entenderíamos que si fuese una inversión muy grande no se hiciese, pero está claro que 30.000 euros no es una cantidad desorbitada para un lugar que podría potenciarse debidamente a nivel turístico”, matizan. De hecho creen que no sería descabellado la creación de “una ruta”, dado que “hay material”.