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martes | 23 abril | 2024
El desmadre de la TIR ya no solo colma la paciencia de las fuerzas de seguridad. También del gobierno local. Los últimos incidentes, con heridos y al menos seis agresiones, una de ellas con arma blanca y un detenido, llevan al ejecutivo socialista a ponerse firme.
Lo primero que se hará desde el Concello es solicitar una reunión a tres bandas con la comunidad de propietarios de la TIR y con la asociación Ahituvi. El mensaje que se transmitirá desde el gobierno local es claro: O colaboran o habrá mano dura.
Y es que la ley, explican fuentes municipales, permite cierta flexibilidad en el régimen sancionador. Por ello, hasta ahora las multas que se imponían a los locales que se pasaban de horario solían ser la mínima, es decir, 300 euros. Una cantidad que amortizan en poco tiempo.
Pero la misma legislación permite también multas mucho más gordas, desde hasta 30.000 euros, o incluso el cierre del local en caso de incumplimientos reiterados.
En las dependencias municipales se ultima estos días la resolución de casi una docena de expedientes sancionadores por abrir fuera de horario. La mayoría son de la zona TIR, donde hay dos locales que acumulan hasta diez denuncias en un solo año.
Cabe destacar que muchas de estas infracciones se producen hasta cinco horas después del horario de cierre permitido para los pubs, las cuatro de la madrugada.
De hecho, cuando la Policía Nacional y Local se dirigió a la TIR a primera hora de la mañana del domingo, y tras haber recibido varias llamadas advirtiendo de peleas, se encontró con tres locales abiertos. Eran las 8:30 horas. En el interior de uno de los establecimientos había unas cien personas, en los otros dos, sobre sesenta en cada uno.
Dos patrullas de la Nacional, una con un solo agente, y una de la Local, tuvieron que hacer frente a un nutrido grupo. Esa noche se registraron al menos seis agresiones en la zona TIR, una de ellas con arma blanca, por lo que hubo un detenido.
Una situación que no están dispuestos a seguir aguantando en el Concello. Por ello, trasladarán a las partes implicadas, Ahituvi y hosteleros de la TIR, la necesidad de que pongan de su parte para establecer el “orden” en la movida y reducir así los problemas de seguridad ciudadana que se están generando.
El gobierno señala que el incumplimiento de los horarios es un problema que “viene de lejos”, aunque lo cierto es que en los últimos tiempos está asociado a una mayor conflictividad.
De hecho, la necesidad de adoptar medidas en la zona TIR era ayer un clamor en las redes sociales, donde no solo los vilagarcianos de a pie, sino también formaciones políticas como el PP o Podemos, solicitaban medidas.
Y la Concellería de Seguridad Ciudadana, que dirige Juan Antonio Pérez Callón, ya se puso manos a la obra para atajar este problema y advierte de que va a haber “mano dura”.
