El temporal rompe los amarres de dos bateas y un barco y los arrastra hasta la playa de Mañóns

El temporal rompe los amarres de dos bateas y un barco y los arrastra hasta  la playa de Mañóns
Un barco bateeiro quedó varado en la playa de Mañóns tras romper los amarres el temporal FOTOS: CHECHU RÍO

La sucesión de temporales sigue dejando un reguero de incidencia en O Barbanza. Después de que el miércoles se vivió una jornada relativamente tranquila, la entrada de la borrasca “Qumaira” ha provocado que durante toda la jornada de ayer se sucediera la intervención de los equipos de emergencia. La más llamativa, además de las imágenes espectaculares que dejó el oleaje batiendo contra las rocas y los puertos, sobre todo en Corrubedo y Aguiño, se registró en la playa de Mañóns. Allí quedaron encallados el barco mejillonero “Segundo Marsu” de Triñáns y un par de bateas después de que el temporal rompiera sus amarres y estar a la deriva durante bastante tiempo.  
Una lancha de la Xunta trató de sujetar una de esas plataformas mejilloneras pasada la una de la tarde cuando deambulaba por medio del agua, pero le resultó imposible pues acabaron partiçendole las vigas de eucalipto donde se amarraban las cadenas, y llegó a la orilla. En los tres casos se colocaron sujeciones para evitar que el viento y las corrientes volviera a arrastrarlas mar adentro y supusieron un peligro para la navegación. A última hora de ayer, tres barcos comenzaron a remolcar una batea y la embarcación mejillonera.
Por otro lado, a primera hora de la mañana se desprendió un trozo de una chimenea de un edificio próximo al colegio de Castiñeiras (Riveira) y fue a parar a un patio interior de la residencia de las monjas. Pasadas las dos de la tarde, se reclamó la presencia de los Bomberos de Riveira ya que existía un riesgo latente de que se cayera a la vía pública el caparazón de dicha chimenea, por lo que decidieron retirarla y acabar con ese peligro. Lo que si cayó fue una persiana de un edificio de la Praza Cinco Calles sobre la calzada de la Rúa Gasset, en A Pobra, según informó la Policía Local, desde donde confirmaron que no causó más daños y se retiró con prontitud.
También quedó colgando por los cables una farola que estaba sujeta a un poste de hormigón en las inmediaciones de la playa riveirense de A Ameixida. La Policía Local dio avisó a la empresa concesionaria del mantenimiento del alumbrado público para que procediera a reparar esa situación. Lo mismo sucedió con otras dos farolas que estaban a punto de caer en la Avenida de Avellaneda, en Boiro. Los agentes municipales solicitaron los servicios de los Bomberos boirenses que las retiraron.
Estos últimos profesionales también retiraron por la mañana (11.30 horas) un árbol que impedía la entrada y salida a la aldea de Cabanas, en Leiro (Rianxo) y cuarenta minutos después fueron requeridos para  limpiar el barro que invadía un vial en Tronco. Esta última situación también se hizo visible en otros puntos de la comarca.

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