La TIR se siente el “último eslabón” de una cadena de infractores y pide “comprensión”

La TIR se siente el “último eslabón” de una cadena de infractores y pide “comprensión”
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“Queremos que el Concello entienda nuestra situación”, apunta Félix Acuña. El presidente de la comunidad de propietarios de la TIR mantuvo ayer contacto con Ahituvi y mostró su interés en que la reunión en Ravella sea “lo antes posible”. En este encuentro tratará de transmitir al gobierno local las sensación de injusticia que reina entre los hosteleros de esta zona.
Y es que en la TIR se sienten como el “último eslabón” de una larga cadena de infractores. “Somos un país latino”, señala Acuña. Por ello, “las cenas se prolongan hasta las cuatro de la mañana”. La infracción, según el empresario, comienza en el restaurante y continúa en otros locales de ocio que “acumulan muchas denuncias vecinales”.
“Nosotros somos los últimos y por eso vienen a por nosotros”, dice Acuña, que reconoce que hay incumplimiento de horarios aunque no detecta un aumento de la conflictividad. “Hubo épocas peores”, señala.
El último fin de semana la Policía acudió a la TIR tras tener conocimiento de seis peleas. Incluso hubo un detenido en las inmediaciones de la zona de ocio por agresión con arma blanca. Pero Acuña apunta a que “ante eso poco podemos hacer”. 
Sí reconoce que hay establecimientos que permanecen abiertos después del amanecer y precisamente señala que estos días está tratando de convencer a sus gerentes para que cierren antes.
Eso sí, las cuatro de la mañana que marca la legislación le parece pronto al empresario, que en la reunión con el gobierno local planteará la necesidad de abordar otras posibilidades, como permitir una hora más, o incluso de designar a la TIR como una zona especial de ocio. Una figura que, señala Acuña, se intentó establecer durante el anterior mandato y en la cual el horario de cierre sería establecido “por Xunta y Concello”. Advierte que otra opción para los locales sería pedir el cambio de licencia para café bar y “pagaríamos menos”. Pero Acuña cree que la solución pasa por el “diálogo” y la “comprensión” y defiende que la TIR juega un papel importante en evitar que los jóvenes cojan el coche para desplazarse a otras localidades.

La TIR se siente el “último eslabón” de una cadena de infractores y pide “comprensión”

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