El espectáculo más lamentable estuvo en Zaragoza

El espectáculo más lamentable estuvo en Zaragoza

LOS alcaldes trivagos se plantaron a Zaragoza para disfrutar de un apasionante cumio de la Liga de las Ciudades Rebeldes. Qué felicidad estar lejos del despacho, un lugar donde hay personas que hasta les da por trabajar. Pablo, antes Pablo Manuel, “Viva la Gente”, Iglesias tocó el cornetín de órdenes y Xulio Ferreiro, el Varoufakis de A Gaiteira; Martiño “2.0” Noriega, y Jorge “El autócrata” Suárez salieron volando. El plan era apasionante, dar palmas, si era posible hasta con las orejas, mientras el amado líder les daba unas lecciones de cómo romper España. Eso sucedía en el interior del pabellón Siglo XXI, porque de puertas afuera había una legión de energúmenos que se consideraban la reencarnación de Agustina de Aragón y pugnaban por alcanzar el título de clon perfecto de la mujer martillo pilón de franceses. Lo suyo no era romper España, sino romper cabezas, que viene siendo el mismo disparate. Cuánto mejor hubiese sido que unos y otros se quedasen en casita. El domingo, que es un día hecho para descansar, hubiese sido más tranquilo para todos. Por cierto, alcalde, su Deportivo perdió. los alcaldes trivagos, todos para uno y uno para todos | aec

El espectáculo más lamentable estuvo en Zaragoza

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