El Concello de Catoira había renovado hace escasas semanas las señales que prohibían el baño en la laguna de Pedras Miúdas. Parece ser que en el momento del accidente que costó la vida a un joven de tan solo 14 años, ya no estaban en el lugar. El alcalde se compromete a reforzar la señalización, pero pide responsabilidad y respeto para que esta se mantenga y pueda advertir del peligro de desobedecerlas.