Cosas muy difíciles de justificar

Todo aquel que aspire a ser candidato de algún partido tiene que pasar la prueba del Twitter. Es como la del algodón, pero adaptada a los tiempos modernos. Tendrá que soportar un escrutinio exhaustivo de todo lo que haya colgado en redes sociales y cualquier comentario fuera de lugar puede dar con su carrera al traste. Por eso, los ataques homófobos realizados por el candidato a la presidencia de Castilla y León de Vox, Juan García-Gallardo, no pueden ser justificados como un mal chiste de un joven que no llegaba a los 20 años, como hizo Abascal. Hay formas y maneras injustificables. FOTO: Juan García-Gallardo | efe