Denuncian la inseguridad en el centro de Ribeira por la presencia de delincuentes reincidentes

Vecinos y comerciantes del casco urbano ribeirense han denunciado la “enorme inseguridad” que se está viviendo de un tiempo a esta parte en la calles de la ciudad, especialmente en los tramos peatonales de la Rúa de Galicia y los viales más próximos. Algunos de ellos incluso van más allá y dicen que el mayor problema se centra en el entorno de las calles Linares Rivas y Cordieiro debido a la existencia de lo que denominan como “supermercados de la droga”, a los que acuden numerosas personas a lo largo del día para comprar o vender sustancias estupefacientes “sin que se haga nada al respecto por parte de las autoridades competentes”, subrayaron.

Los empresarios con abiertos negocios en esa zona señalan que en las últimas semanas se redujo de manera considerable el tránsito de viandantes, que son potenciales clientes, pese a que ese tramo de la calle peatonal está considerado como el más comercial de Santa Uxía. Añaden que se trata de una situación que es consecuencia de la presencia de delincuentes peligrosos y reincidentes, que se pelean y discuten a gritos en plena vía pública y que, además, han perpetrado algunos robos o hurtos en sus locales, “lo que ahuyenta a los compradores, que prefieren dar un rodeo antes de pasar por allí”. Los residentes dicen que no se atreven a abrir la puerta de sus domicilios por temor a que quien esté detrás sea alguno de esos individuos, y que salir a partir de ciertas horas a la calle se hace “casi prohibitivo”.

De igual modo, hicieron referencia al robo con violencia registrado el pasado jueves por la tarde en la Rúa Canarias -cercana a esa zona de la Rúa de Galicia-, en el que dos conocidos delincuentes asaltaron a un hombre, incluso esgrimiendo un cuchillo de cocina de gran tamaño, para pedirle el dinero. Se quejaron de que, pese a que ambos fueron detenidos por la Policía Nacional, ya están nuevamente en la calle tras pasar a disposición judicial. La jueza que instruye la causa contra ellos no descartaba la posibilidad de enviarlos a prisión preventiva, ya no sólo por ese hecho sino también por sus antecedentes, pero ninguna de las partes personadas solicitó la adopción de esa medida.

Los comerciantes añaden que a ello se suman los dos robos en once días que sufrió una tienda de telefonía, y que todo junto está provocando que empresarios que tienen intención de abrir negocios en esa calle o su entorno se plantean no hacerlo, al entender que su viabilidad y rentabilidad estaría en juego por el riesgo de sufrir robos, y otro tipo de actos.