La acusada de asesinar a Yulisa inculpa a su expareja, del que dijo que la sometía y maltrataba

Melisa Abelleira Castro, uno de los dos acusados por el crimen en A Pobra de la dominicana Yulisa Altagracia Pérez, mantuvo en su declaración en el juicio en la sección compostelana de la Audiencia Provincial la inculpación que hizo en la última que ofreció en fase de instrucción sobre su expareja. Dijo que Ventura Lustres Miranda, “O Farelo”, también procesado por el asesinato con ensañamiento -el cuerpo de Yulisa presentaba 36 puñaladas-, fue el autor de esos hechos ocurridos el 7 de junio de 2015. La joven mantuvo esa línea argumental vinculándola al hecho de que era una mujer sometida, que hacía todo lo que le decía su entonces pareja y subrayó que era víctima de maltrato físico y psicológico por su parte. De hecho, rompió a llorar al responder preguntas que le hicieron la fiscal y su abogado en las que tuvo que relatar varias veces escenas de terror que dijo haber sufrido en el día a día de su relación con el otro acusado. 
La fiscal adelantó el visionado de la grabación del bar Maruxía, de Ribeira en la que se observa como Melisa fue a recoger a Yulisa y ambas se marcharon en un Seat Ibiza blanco, algo que la acusada no negó, pero dijo que había ido a buscarla siguiendo órdenes de Ventura para que la prostituta prestase servicios a terceras personas. Un amigo de la víctima mortal declaró después que vio la escena y que Yulisa le pidió que apuntase la matrícula del coche en que se iban por si le pasaba algo. La acusada añadió que desde la capital barbanzana la llevó a las inmediaciones de su casa en el barrio pobrense de Tetuán y que, tras entrar en el domicilio, él la encerró como ya hiciera otras veces y se marchó, regresando horas después a la vivienda con la ropa ensangrentada. Añadió que él introdujo su ropa en una bolsa negra de basura y le dijo a ella que le entregara la suya para tirarla.
Melisa, que comparte un hijo con “O Farelo”, culpó a este último con lo relacionado con las drogas y violencia. Declaró que su vida se convirtió en un infierno desde que en 2013 empezó a vivir con Ventura, pues precisó que hasta entonces ella trabajaba en una conservera, era deportista y estudiaba. Pero, señaló que fue conocerlo a él, lo dejó todo y la introdujo en el mundo de la droga, obligándola a consumir de forma desaforada. Agregó que luego llegaron las palizas y el control absoluto, haciendo que viviera en un permanente estado de terror por amenazas y golpes, llegando a romperle los tobillos y el labio, teniendo que recibir 15 puntos de sutura. Respecto al cambio de declaración al tener nuevo abogado, dijo que las ofrecidas antes fueron por imposición de Ventura.
Por su parte, “O Farelo” se desentendió de todos los hechos relatados por su expareja, afirmó que era ella quien gestionaba la droga, y precisó que todo lo ocurrido se produjo sin su conocimiento, desvinculándose del crimen al sostener que él estuvo durmiendo a esas horas después de haber salido de fiesta por la noche y encontrarse en un “estado de intoxicación pleno”. Tanto él como Melisa negaron que los teléfonos móviles que coinciden con el de Yulisa en el tráfico de los repetidores no son de su propiedad pese a estar a su nombre y declararon que los usaba el otro en sus negocios de menudeo de cocaína. Él dijo que las armas intervenidas, como puño americano, pistolasa. bate de beisbol, porra y cuchillos dijo que eran de Melisa.
Respecto a lo sucedido después, ambos acusados coincidieron en que se desplazaron para acudir a una churrascada con un conocido, pero que no se llegó a celebrar. A partir de ahí ya vuelven a diferir sus testimonios, pues Melisa dijo que estuvo bajo el control y supervisión de Ventura, y este último sostuvo que fue a tomar café con amigos y de noche se fue a la playa, en la que supuestamente se habrían deshecho del bolso de Yulisa, para poder mariscar furtivamente, pero sin éxito.

POSIBLE DELITO DE FALSO TESTIMONIO
Luciano Prado, abogado de Melisa Abelleira, pidió testimonio de la declaración de hoy de una prima de Yulisa por la posible comisión de un delito de falso testimonio, pues sostuvo que en la instrucción indicó que una persona le dijo que vio a Ventura tirar una bolsa negra a un contenedor, y que ayer manifestó que nunca declaró esa circunstancia. ll