La Aemet se interesa por un fenómeno atípico de lluvia muy intensa y viento

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) se interesó a finales de esta semana sobre un episodio de lluvia muy intensa y fortísimos vientos que se registró el pasado 16 de enero en la comarca de O Barbanza y que se dejó sentir de forma especial en el lugar pobrense de San Isidro. Al recibir un aviso de esta incidencia que quienes lo presenciaron lo asociación a un posible tornado, decidieron desplazarse hasta la zona el jefe de Estudios y Desarrollo de dicho organismo en A Coruña, Francisco García García, y una compañera de su equipo, acompañados por el responsable de la agrupación local de Protección Civil, David Cardalda. Además de comprobar in situ los efectos causados por ese fenómeno, también pudo hablar con testigos directos de lo ocurrido para que pudiera tener una percepción lo más real posible de los referidos hechos.

Fue una residente en ese lugar situado en la ruta de los cruceiros, y que prefiere permanecer en el anonimato, la que le relató lo que en torno a las cuatro y media de la tarde de aquel día presenció lo que le hizo pensar “esto acábase, o mundo acábase”. Francisco García precisó que esta vecina se lo describió perfectamente. En el relato que le ofreció al miembro de la AEMET recordó que eran en torno a la hora referida cuando estaba leyendo en una habitación y todo se empezó a oscurecer de tal modo “que parecía noite pechada”, y tuvo que encender la luz para ver. Su curiosidad hizo que se acercase a la ventana para comprobar lo que estaba pasando y nada más asomarse “vin como viña cara min unha cousa blanca, con chuvia e vento que hacía que se batiera todo y que me impedía ver o camiño e ás árbores”. Esta mujer añadió que, a la vez, escuchó un ruido muy fuerte, lo que sumado a lo que estaba viendo hizo que se asustase, cerró las contraventanas y se metió hacia el interior de la habitación.  

La vecina describió que lo que iba hacia su casa era “unha cousa dunha violenta tremenda, que iba gañando por momentos, era unha loucura. Para a miña idea foi coma un pequeno tornado”. Y agregó que se trató de mucha agua y viento en cosa de 15 o 20 segundos, por lo que subrayó que “se cadra a durar un minuto tira coa casa e alá vai todo, pero non foi a máis, calmouse e quedou en chuvia normal. Deu a vida que foi pouco tempo, pero violentísimo”. Tras escuchar atentamente a la mujer, el jefe de Estudios y Desarrollo de AEMET en A Coruña reaccionó diciendo que “es así de real. El que lo ha visto siempre lo cuenta así”, aunque destacó la escepcionalidad de contar con ello, pues precisó que es muy raro contar con un testigo tan directo, que lo haya visto como si fuera en el cine, de ahí que crea que es fundamental conocer ese relato. Gracias a ello pueden saber que se trató y una masa cálida y extensa con mucha lluvia que entró desde la ría arousana por el sureste y que hubo una fractura en la precipitación que pasó de continua a muy intensa y luego volvió a ser continua, y tienen constancia de que ese día hubo dos: la reseñada y otra hacia las 12.30 horas.

Francisco García indicó que también tuvo oportunidad de hablar con miembros de las agrupaciones de Protección Civil de Boiro y Ribeira, que le contaron que tuvieron que salir a múltiples incidencias por temporal, pero que ninguno de ellos les dijo que estuvieran relacionadas con un tornado o similar. Pese a ello, este profesional de AEMET tuvo conocimiento a través de este periódico de otro suceso que los testigos describieron como “un pequeño huracán” en Boiro y que levantó varias planchas del tejado del pabellón de Santa Baia y otra situadas en un lateral se vieron seriamente dañadas, por lo que también será objeto de estudio y será reportada, en primer lugar desde el punto de vista climatológico, y segundo, por razones diversas, como que nos lo soliciten las compañías de seguros.