A POBRA - Alertan de la entrada de droga por unas calas situadas cerca de la playa de Cabío

Las calas pobrenses de Niñeiriños y Agronovo, cerca de la playa de Cabío-Lombiña, están siendo desde hace tiempo lugar de entrada de droga. Así lo apuntan varias personas que acuden de vez en cuando a pasear por esa zona que, aseguran, no es muy frecuentada, ya que está algo apartada y tampoco está lo suficientemente acondicionada como para caminar. Señalan que el hecho de que no haya mucha gente en ese entorno que pueda verlos realizar las descargas de esa mercancía ilegal, así como recogerla, lo  convierte en un sitio atractivo para ello. Indican que las planeadores llegan hasta la costa y deposItan los paquetes y se marcha, mientras por tierra son jóvenes, sobre todo, los que acuden hasta esos arenales a por esas sustancias estupefacientes.
Algunas de las personas que alertan de esta situación señalaron que quienes acuden a recoger la droga lo hacen en motos, pues les resulta más fácil desplazarse por esa zona y a gran velocidad, pudiendo huir de la persecución policial por los diversos y estrechos senderos que hay en el lugar y que incluso llegan hasta lo pies de las calas. Esos testigos añaden que en el caso de que las fuerzas de seguridad los persigan, parece que lo tienen bastante fácil para darles esquinazo cambiando en milésimas de segundo de recorrido, pues son varios los situos por los que circular y con posibilidad de desviarse para darse a la fuga con éxito. Algunas fuentes apuntaron que efectivos de la Guardia Civil de la zona suelen patrullar por el lugar como lo hace por otros lugares, pero parece que no los han descubierto o su paso por  allí no coincidió con las descargas y recogida de la droga. Del mismo modo, desconocen si la Benemérita es conocedora de esta circunstancia, pero indican que en el pueblo es vox populi.
En relación a las motos con las que los jóvenes acuden a por las sustancias estupefacientes, algunos testigos señalan que son las mismas con las que luego transportan la droga hasta la viviendas en las que se distribuye. En algunas zonas en las que la Guarida Civil desmanteló puntos negros e incluso un “supermercado” de la droga, como en la Rúa Nova, entre los residentes era frecuente escuchar quejas por el ruido que ocasionaba el ir y venir de motos, sobre todo durante las horas de la madrugada.
En relación a esas calas tan apartadas y poco frecuentadas se indica que acude alguna gente  hasta allí para hacer fiestas o botellones, como lo refleja el hecho de que en diversas ocasiones aparecieron numerosas latas de cerveza tiradas en la arena y en sus inmediaciones. Aunque en la zona hay un par de casas, sus dueños no suelen pasar demasiado tiempo en ellas y dicen que desconocen lo que pasa en su entorno, pero confirmaron que en algunas ocasiones sintieron pasar motos. n