Desalojada una zona de la movida nocturna de Ribeira por aglomeración de gente consumiendo de pie en la calle

La Policía Local de Ribeira se vio obligada a desalojar la zona de la movida nocturna en el entorno de Campo de Marte y Alcalá Galiano debido a que se registró una gran aglomeración de gente consumiendo en un espacio muy reducido, incumpliendo las normas del estado de alarma. Ocurrió en torno a las doce menos veinte de la pasada noche cuando uno de los hosteleros de esa zona el que avisó a los agentes municipales de la gran afluencia de clientes de los locales de hostelería que se estaban concentrando de pie en esa zona de la vía pública y sin respetar la distancia de seguridad. Según indicó algún testigo, en un primer momento de la noche la situación estaba controlada, pero llegó un momento en que "la cosa se estaba desmadrando", por lo que fue necesario intervenir. Era aproximadamente medio centenar la cifra de personas que estaba de pie tomando sus consumiciones a las que se obligó a abandonar el lugar, permaneciendo únicamente las que estaban sentadas en las terrazas o se hallaban dentro de los locales de hostelería de esa zona que cumplían con las normas y que siguieron abiertos hasta que les llegó la hora de cierre.

Sobre lo ocurrido anoche, Fran Pérez, propietario del bar Ventos Vellos, manifestó que hubo un momento que "nos vimos desbordados" en relación a como se estaba llevando el distanciamiento y que se vieron en la obligación de llamar a la Policía "para que se normalizara todo". "Tenéis que entender que sólo podemos servir a la gente sentada. Que más quisiéramos que poder servir a todos, pero de momento no se puede. Todos sabemos que con cuatro copas nos olvidamos de todo, por eso os pedimos a vosotros también un poco de ayuda y comprensión con la situación", puntualizó.

Una situación semejante, aunque con menos gente, se registró a la una de la madrugada en la zona próxima al parque García Bayón. En este caso fue la patrulla de servicio nocturno de la Policía Local ribeirense la que se percató de la situación cuando al pasar por allí comprobó que, además de la clientela sentada en las terrazas, había una veintena de personas consumiendo de pie en un reducido espacio de la vía pública, por lo que se procedió a su desalojo. Fuentes policiales destacaron la colaboración por parte de los hosteleros de este lugar como de Campo de Marte y Alcalá Galiano para controlar esas situaciones, además del exquisito cumplimiento de los horarios de cierre, tanto de las terrazas como del propio establecimiento. A partir de ese momento, con los locales desalojados y sus puertas cerradas, fueron numerosos los veinteañeros, sobre todo, los que permanecieron en la calle.