Detienen en San Isidro a un ladrón de dos furgonetas de reparto de pan y que intentó atracar a una taxista

Un individuo de mediana edad,  J.B.G., fue detenido en torno a las cinco y media de la tarde de ayer en San Isidro tras ser acusado de la sustracción de dos furgonetas de reparto del pan en Boiro y A Pobra, así como de otro coche en esta última localidad, y por intentar atracar a una taxista de Ribeira. Las fuerzas y cuerpos de seguridad habían establecido controles en los principales accesos a la Autovía do Barbanza y en la carretera comarcal AC-305, así como en otros viales de la comarca para interceptarlo, pero en el resto de la mañana no lograron localizar al autor de los hechos, ni la última furgoneta robada.

Fue en torno a las diez de la mañana en que se tuvo conocimiento del robo en el lugar de Escarabote, en la parroquia boirense de Lampón, de una furgoneta Citroën Berlingo, que una empresa de esa zona utiliza para el reparto del pan, y que el ladrón utilizó para darse a la fuga. Fue entonces cuando se avisó a la Guardia Civil de lo ocurrido y se dio traslado de ello a diferentes destacamentos de la comarca y alrededores para montar controles, y también se solicitó la colaboración de patrullas de las policías locales de la zona. Poco después, se supo de la sustracción de un automóvil de la marca Citroën y de color gris en la zona del Campo da Feira, en A Pobra, lugar en el que fue localizada la furgoneta robada en Escarabote, por lo que se relacionó al mismo ladrón con esos dos sucesos. 

Minutos después, ese coche fue hallado en la urbanización pobrense O Lagar, no muy lejos de donde fuera robado. Además, tras deshacerse de ese coche, ese ladrón aprovechó para llevarse otra furgoneta de reparto del pan, una Peugeot Partner, estaba abierta y con las llaves en el contacto, dándose a la fuga con ella, sin que se sepa aún donde la abandonó. Ya por la tarde, un hombre pidió los servicios de taxi en la parada de Ribeira para que lo llevase a la zona de Montañó, y aprovechó que estaban en  medio del monte para pedirle que le diera el dinero, a lo que la taxista se negó, oponiendo resistencia, y el ladrón acabó huyendo. Ella pidió ayuda en una casa, y desde allí avisaron a la Benemérita para informarla de lo sucedido, descubriéndose que se trataba del caco buscado.

Varias patrullas de la Guardia Civil de Boiro y Porto do Son, con la colaboración de compañeros del destacamento de Tráfico de Santiago de Compostela, se movilizaron por sitios estratégicos para localizarlo e interceptarlo, mientras que las policías locales hicieron lo propio en viales más locales. Para la búsqueda se contó con los datos aportados por varios testigos que indicaron que vieron al ladrón en alguno de los escenarios de los robos de los referidos vehículos, y cuya descripción coincidía con la de un vecino de Boiro finalmente arrestado.