Investigan la causa de la muerte de un septuagenario que apareció flotando en la piscina de su casa

Pese a que desde hace un tiempo se le diagnosticó una patología pulmonar, ningún miembro de la familia del riveirense José Luis Romero Méndez, de 71 años, se podía esperar un fatal desenlace como el que se produjo a las once de la mañana de ayer. El cadáver de este vecino de Frións, en la parroquia de Carreira, apareció flotando en la piscina del domicilio familiar, donde se quedara solo por unos instantes y realizaba labores de mantenimiento en dicha piscina. Ahora será la autopsia que se le practicó ayer por la tarde en el Hospital Provincial de Conxo la que determinará la causa de su muerte, cuya investigación está llevando a cabo la comisaría de Policía Nacional.
Fue la mujer de la víctima la que al regresar a casa se lo encontró boca abajo en el agua. Entre ella y un vecino lo sacaron de la piscina y, mientras se aguardaba por la llegada de los medios de emergencias, sanitarios y de seguridad, le practicaron masajes cardiovasculares entre un familiar y otro residente en las cercanías. Ambos fueron relevados por un policía local, que estuvo practicándole le reanimación cardiorrespiratoria, así como hicieron los miembros del Grupo de Apoio e Emerxencias Municipal (GAEM), hasta la llegada del equipo médico del centro de salud de Santa Uxía. Estos medios, junto con los Bomberos de Riveira, fueron movilizados por el 112 Galicia tras recibir la alerta de un familiar sobre lo ocurrido.
Desde Urxencias Sanitaria-061 indicaron que su ambulancia con base en la capital barbanzana no estaba disponible, ya que estaba en otro servicio con un hombre en parada cardiorrespiratoria en la entrada a la playa de Coira, en Porto do Son, y al que pudieron reanimar y trasladar en helicóptero al Clínico de Santiago. La ambulancia más cercana que había era la de Boiro, que estaba en otra intervención, que al acabarla se dirigió al lugar de la incidencia en Frións. También se movilizó un helicóptero medicalizado del 061, que llegó a despegar de su base, pero dio vuelta al certificarse por parte del médico y enfermera la muerte del septuagenario tras resultar infructuosos todos los intentos para salvarle la vida con la realización practicándole la RCP.
Los restos mortales de José Luis Romero son velados en el tanatorio Los Dolores de Xarás hasta que a las ocho menos cuarto de esta tarde partan en dirección a la iglesia de San Paio de Carreira, en Frións, en donde se celebrará un funeral y, seguidamente, recibirán sepultura en el cementerio situado en ese mismo recinto religioso.