Kilómetros de sudor por una causa justa

Llevaba mucho tiempo preparándolo todo la comunidad educativa del colegio Pilar Maestú Sierra, de A Pobra, para que se pudiera desarrollar la carrera solidaria “Vacaciones en Paz” y sus miembros no querían dejar pasar la oportunidad de aportar su granito de arena para contribuir a hacer más agradable la vida de los niños saharauis de los campamentos de refugiados de Tindouf que pasan el verano en Galicia, varios de ellos en la localidad barbanzana. La propuesta de la actividad partió de la oenegé Solidariedade Galega co Pobo Saharaui y desde la dirección del centro le dieron todo tipo de facilidades. La que no parecía estar dispuesto a darlas era la meteorología, pues la previsión de lluvia obligó a aplazar el evento en un par de ocasiones, una de ellas en la conmemoración del Día Mundial de la Paz, hasta que ayer dio una pequeña tregua, e incluso lució el sol en la prueba.

El objetivo de la carrera no era con afán competitivo sino que, como se dice en muchas ocasiones, lo importante es participar, en esta ocasión para recaudar fondos con los que permitir que se pueda desarrollar el programa “Vacaciones en Paz”, para proporcionarles alimentos, ropa y atención médica a los niños que viven en los campamentos y donde carecen de esas prestaciones. Fueron un total de 79 alumnos los que se sumaron a esta iniciativa, dando varias vueltas a dos circuitos de 180 y 90 metros, respectivamente, dependiendo de sus edades. En sus dorsales podía leerse, dentro de una paloma blanca, el lema de la prueba: “Coa paz gañamos sempre”.

Según la cifra de rotaciones realizadas así será la aportación que realizarán sus “patrocinadores”, ya sean familiares, amigos o vecinos, con los que acordaron que se comprometerían a entregar una cantidad de dinero que oscila entre los 30 céntimos y los 5 euros por cada una. Hubo quien incluso presumió de completar la docena de vueltas al circuito de mayor longitud. La cantidad total que se consiga, tras las pertinentes comprobaciones y que se recaudará en próximos días, se ingresará en la cuenta bancaria de la citada oenegé, sobre la que el colegio hará un seguimiento para conocer su uso.

También se sumaron a todos ellos, aunque no contabilizan para la recaudación, un buen número de profesores, padres, hermanos y amigos de los escolares. Según los responsables de la actividad, la carrera fue una magnífica demostración de la solidaridad de los chiquillos y creen que es una magnífica forma de educarlos en valores. Al final, hubo sendas actuaciones musicales sobre piezas relacionadas con la paz, una interpretada con palillos y otra con panderetas.

En el colegio Galaxia, de Riveira programaron una actividad similar en favor de los niños de Níger y que también se aplazó.