A POBRA - Ningún testigo aporta información valiosa que permita avanzar en la desaparición de Diana

Ninguno de los decenas de testimonios que recogió la Guardia Civil en un periodo de casi cinco meses ha aportado información clave para la resolución del caso de la desaparición en A Pobra de Diana Quer, pues nadie vio lo que le sucedió. Esta es una de las razones por las que siguen sin fructificar las investigaciones para dar con el paradero de la joven de Pozuelo o con las personas que supuestamente la raptaron, y que hace que este complejo caso adquiera tinte más preocupantes y que hacen que su resolución parezca más lejana. Esta circunstancia ha trascendido después de que este periódico diera cuenta el pasado domingo de que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Benemérita centra sus sospechas en dos individuos, aunque por el momento no tiene los indicios o pruebas suficientes para incriminarlos.

Hasta la fecha se sabe que las últimas personas que vieron a diana Quer fue un matrimonio de jubilados, que le indicó a un amigo que a las tres menos cuarto de la madrugada del pasado 22 de agosto vio en el entorno del puente de San Antonio a una joven cuyas características coinciden con las de Diana Quer. En el programa Espejo Público dieron cuenta ayer de que habían tenido conocimiento de una mujer que se encontraba en la pizzería Mi Manda Picone -por delante de ese mismo sitio la vio pasar otra persona- observó de espaldas y a unos 60 metros, a la altura de una antigua discoteca abandonada, a una joven cuyas características responden a las de la adolescente madrileña -a la que conocía- y que iba caminando de regreso hacia su casa de veraneo en el lugar de Cabío: alta, delgada, de melena larga y que vestía un pantalón corto rosa.

Por lo demás, los investigadores siguen trabajando en el iPhone 6 de la joven madrileña, a la espera de que pueda aportar algunas información valiosa para avanzar en el caso. En ello centran parte de sus esfuerzos una vez que parece que no se extrajo nada de interés de la goma negra del pelo hallada por la madre en el entorno del aparcamiento de las caravanas de los feriantes.