Las playas de Tanxil y Quenxo mejoran su accesibilidad y pasan a estar conectadas entre sí

El alcalde de Rianxo, Adolfo Muíños, acudió ayer, acompañado de la concejala Adelina Ces, a visitar las obras realizadas en la playa de Tanxil, gracias a las cuales tanto este arenal como el de Quenxo han ganado en accesibilidad.
Tal y como explicó el propio regidor, los trabajos se realizaron al amparo de un plan de accesibilidad de zonas turísticas de la Axencia Galega de Turismo de la Xunta de Galicia.
Durante la visita, alcalde y edil mostraron las obras realizadas, que han permitido la conexión de los arenales de Tanxil y Quenxo, anteriormente separados. Mediante la instalación de unas rampas, desde ahora será posible el paso con una silla de ruedas a ambas playas. La escalera existente ya no es, por tanto, la única manera de poder acceder. Además, gracias a esta mejora, los usuarios podrán ir de un lado a otro del paseo, tal y como explicó el regidor durante la visita a la zona.
Por otra parte, también se han instalado unos baños adaptados que sustituyen a los anteriores con los que contaba Tanxil y dos pasarelas, también adaptadas, “que salvan un pequeno desnivel para que se poda acceder directamente á area”, señaló Muíños.
El coste total de los trabajos ha sido de 35.000 euros, abonados en un 75 % por la Xunta y en un 25 % por el Concello. “Todo está realizado en madeira, excepto o interior dos baños, en aceiro”, comentaba ayer el regidor rianxeiro.
Aprovechando las obras, también se ha mejorado, ya fuera de la subvención, un puente que se encontraba deteriorado y un pasamanos en madera.