Reportaje | Gusto por la tradición

La villa boirense, con motivo de sus fiestas de verano, y la parroquia ribeirense de Carreira disfrutaron ayer de una jornada muy vinculada a las mejores y más divertidas tradiciones gallegas. En la primera fue el parque de A Cachada el que dio cabida a la recreación de una malla de centeno por la asociación vecinal Abrañeira, que fue seguida por numeroso público. Fue un anticipo de lo que se podrá ver el próximo 4 de agosto en la undécima malla que ese mismo colectivo realiza en el lugar de Ordenario, cuando también habrá grupos folclóricos y juegos tradicionales como chave, tiro de la cuerda y carrera de zancos.
Entre las 45 personas que integran Abrañeira hay las mujeres que le dan la vuelta a la paja para otras 14 personas vuelvan a mallar. En esta ocasión, entre ese grupo que mayoritariamente está integrado por hombres había dos niñas, Lucía Romero y Uxía Ramallo, de 13 y 12 años, respectivamente, que vivieron su primera experiencia en esos quehaceres, y que indicaron que era divertido, además de que contribuye a socializarse la gente, al reunirse para ensayar y hablar de sus cosas. Sus responsables agradecen que en la labor de recuperación y de dar visibilidad a esta tradición se impliquen nuevas generaciones. Todos ellos lucían crespones negros como muestra de duelo por la reciente muerte de Manuel Calo, a los 85 años, y que fue quien les enseñó hace once años a mallar, así como el fallecimiento en diciembre de Evaristo Teira, de 36 años, mallador y colaborador.
En Carreira se celebró la Muiñada de Amendo, que arrancó con una carrera de orientación en la que participaron medio centenar de personas repartidas en ocho equipos, a la vez que se desarrollaron juegos tradicionales. A la una de la tarde tuvieron lugar los “Contos no Muiño” con Daniel Gómez Ramil y los “Versos no Muiño” con Calos Lixó, que atrajeron a muchos niños y a sus familiares, al igual que lo hicieron los molineros Jaime López y José Fernández “de Cochas” en el molino de este último. De allí se dirigieron, previa parada en el Muiño de Inasia para una pequeña proyección, a la comida campestre en la que los asistentes llevaron viandas para compartir. En la sobremesa actuaron las pandereteiras de Carreira, Xoldra Rachada. Aprovechando la disputa del Mundial de Fútbol en Rusia, tuvieron su propia competición mundial de enhebradores de aguja, para rematar con la tradicional “batalla fariñeira”. l