Ruiz asumirá la portavocía del PP y las delegaciones de Cultura y Educación

La renuncia de Herminia Pouso Maneiro a su acta de concejala del grupo municipal del PP ribeirense ha provocado un nuevo sobresalto en el partido de la gaviota, donde ha sentado como un jarro de agua fría. Sin embargo, el alcalde pretende que la nave de los populares siga a flote y trata de reconducir la delicada situación. Debido a que queda muy pocos meses para acabar el actual mandato y sin tiempo material para que otra persona se ponga al frente de nuevas responsabilidades, será el propio Manuel Ruiz el que asumirá la portavocía de su grupo municipal, al igual las delegaciones de Cultura y Educación, funciones todas ellas que hasta ahora venía desempeñando Pouso Maneiro.
Respecto al integrante de la lista del PP en las pasadas elecciones municipales que recogerá el acta dejada por Pouso Maneiro, el siguiente en entrar sería David Fernández, joven empresario del sector hostelero, que iba de número 12. Cabe recordar que en los populares se produjeron previamente dos bajas: la de Lola Elorduy, que dejó el PP por discrepancias con el alcalde y decidió mantener su acta de edila en el grupo mixto, y la renuncia por motivos personales de Aroa Fernández, a la que sustituyó Anxo Orellán, además del relevo de Fabiola García, que se fue a la Xunta -es la actual conselleira de Política Social-, por Suso Freire. En el caso de David Fernández, Manuel Ruiz ya mantuvo una conversación con él, quien le contestó que “me hace ilusiónt trabajar para el conjunto de los ribeirenses", por lo que entraría de concejal -podría encargarse del área de Xuventude-, pero que lo tiene que consultar con su entorno, sobre todo con la familia y sus socios de la empresa. El propio interesado manifestó a este periódico que “yo siempre estoy con Manolo”, pero que le pidió unos días para pensarlo y anunció que el lunes se sabrá su decisión. En caso de que renuncie, la siguiente en la lista es la palmeirense Eva Vizcaya.

Rompen una lanza a favor del alcalde
Los seis concejales que aún le quedan a Manuel Ruiz en su equipo de gobierno rompieron una lanza en su favor y expresaron su apoyo como candidato para las próximas elecciones municipales del 26 de mayo. Aunque agradecieron la labor de Herminia Pouso, a la que calificaron de “inteligente” y “amiga” -Esther Patiño dijo sentirse “moi decepcionada por tomar a decisión sen falar con ninguén”-, todosn indicaron que no comprenden ni pueden compartir las razones que expone para su renuncia, que dijeron que les causó sorpresa, al igual que diga que el alcalde es “autoritario, pois mantivo diálogo e consenso”. Anxo Orellán precisó que “en ocasións tivo que ser máis recto e menos condescendiente e lle iría mellor”. Suso Freire precisó que el alcalde cedió en asuntos como que todos los vendedores de la plaza de abastos fueran en una planta en lugar de dos o que la carretera de Aguiño mantuviera los dos sentidos en vez de dirección única, el tiempo demostró que hubiera sido mejor no ceder.

Pouso había señalado que el detonante de su decisión fue su discrepancia con la concesión de una subvención relacionada con la memoria histórica, además de no compartir la idea de peatonalizar calles, por lo que se ausentó del pleno en la votación de ese asunto para no romper la disciplina de voto. Freire también manifestó que lo ocurrido con la referida ayuda es “algo insignificante”, piensa que cuando Herminia vea los beneficios de esa humanización “cambiará de pensar”. Elvira Pereira, que dijo hablar desde el corazón, manifestó que Pouso Maneiro discrepaba como cualquiera de ellos, pero siempre se llegaba a un consenso, “si embargo, cuando la gente no quiere hablar no se puede llegar a un acuerdo... y en este caso la dictadura la hace ella”. Los ediles señalaron que “ten que haber outro motivo, pois non había discrepancias, só opinións diferentes, como podemos ter todos”. Y concluyeron que no creen que se vaya a otro partido, pero apostillaron que “xa non nos sorprende nada”.  l