Ruiz retomará conversaciones con los dueños de una casa en Castiñeiras situada en una curva

El alcalde ribeirense mantendrá la próxima semana una reunión con los dueños de una casa de Castiñeiras que ocupa parte de una curva con la finalidad de llegar a un acuerdo que permita mejorar la seguridad vial en ese punto. Así lo anunció Manuel Ruiz en el transcurso del último pleno, concretamente en el debate de un expediente de crédito extraordinario por importe de 692.170 euros, en el que se incluye una partida de 232.107 euros para la adquisición de un inmueble en el lugar de Campos (Carreira) -el Ejecutivo local indicó que el acuerdo de compra se cerró en 200.000 euros, y que el resto del dinero será para mejoras en ese lugar- con la finalidad de ampliar la carretera DP-7305, en las curvas de A Muiñeira, para mejorar su seguridad viaria. Respecto a la propiedad de Castiñeiras, el mandatario local recordó que “xa quixemos mercar parte da finca de atrás para ampliar a vivenda, pero pedían moitos cartos. Agora queren reunirse conmigo e é unha boa oportunidade de chegar a un acordo”. 

Fue una sesión en la que se aprobó que se saque a licitación de manera conjunta y por un periodo de tres años, prorrogable por otro año más, el contrato de servicios de operación y mantenimiento de los sistemas de saneamiento en alta y depuración asociados a las EDAR de Couso y Corrubedo por un importe anual de 1.421.845 euros. Pese a que durante el debate los grupos de la oposición reiteraron las propuestas de plenos anteriores y dejaron entrever su voto negativo, el Ejecutivo les pidió que recapacitasen, pues señaló que de no salir adelante esa licitación no habrá posibilidad alguna de que se reduzca la tasa que pagan los vecinos por ese servicio, teniendo en cuenta una más que previsible rebaja en las ofertas que se puedan presentar. 

Incluso, el alcalde trató de convencerlos al indicar que en el momento actual el Concello no iba a ser más eficiente que una empresa a la hora de llevar esa gestión, precisando que las cuentas no le dan si la Administración local, “pois todo son gastos”, precisó. En este sentido, Ruiz dijo que tendrían que contratar a todo el personal necesario, que no es poco, pero que también resulta inasumible debido a las condiciones salariales y al convenio colectivo de los funcionarios municipales, “que non permiten competir coas empresas”. Debido a los problemas para llegar a un acuerdo, el mandatario llegó a plantear la posibilidad de retirar ese punto del orden del día si la oposición mantenía su voto en contra. 

Al final, propuso que se suspendiera la sesión plenaria durante 5 minutos “e o falamos”. Ese periodo inicial se convirtió en media hora, pero sirvió para que Ruiz lograse que el PSOE y SumaRibeira cambiasen su intención de voto por las abstenciones de sus dos ediles. Ello fue posible después de que, a iniciativa del portavoz del partido del puño y la rosa, se introdujese un nuevo punto en el acuerdo, para que antes de que remate el primer trimestre de 2021 se encargue un estudio en el que se analicen las ventajas e inconvenientes de un posible modelo de gestión directa del ciclo integral del agua. Debido a que PBBI y BNG se mantuvieron firmes en su voto en contra, la votación final acabó en empate a 9, por lo que el voto de calidad del alcalde fue decisivo para que los trámites de dicha licitación sigan su curso.

Fue una sesión plenaria en la que la unanimidad presidió otros de los asuntos debatidos y votados, como por ejemplo con la suspensión de las licencias urbanísticas en Punta do Laño, en Aguiño, debido a que el Concello pretende anular la licencia de actividad industrial para un terreno para poder recuperar esa zona, que todos los ediles coincidieron es que es uno de muchos parajes incomparables del municipio.

El pleno ya aprobó en el 2018 suspender  un acuerdo sobre el paseo de Castiñeiras
Que el PBBI impugnase ante la Subdelegación del Gobierno y la Delegación Territorial de la Xunta un acuerdo plenario de finales de septiembre en Ribeira en relación a la aprobación de la modificación del proyecto de recuperación de la servidumbre de tránsito entre las playas de Castiñeiras y de Os Mosqueiros, y que le valió los reproches del equipo de gobierno, tiene algún antecedente. Relacionado con esa misma cuestión, el propio pleno aprobó por unanimidad en su sesión del 29 de octubre de 2018 que se suspendiera la eficacia del acuerdo adoptado medio año antes que daba luz verde a ese proyecto. Esa decisión se adoptó después de que en agosto de ese mismo año fueron interpuestos varios recursos de reposición por parte de varios vecinos , basándose en diversas causas de nulidad de pleno derecho, implicando además “perjuicios irreparables, non só ao interese particular, senón ao interese público prevalente”.