Un Arosa mermado, a apoyarse en su gente para tumbar a un gigante

Arosa y Racing de Ferrol se enfrentan esta tarde en A Lomba (18 horas) 24 años después en un clásico de antaño del fútbol  gallego. Un partido marcado por las bajas y los problemas físicos en los locales, segundos en la tabla con 18 puntos, y la urgencia de triunfos en los visitantes, décimos con 12 puntos y máximos favoritos al título por historia y presupuesto.
Rafa Sáez no puede contar con Manu Rodríguez, sancionado, ni Carlos Torrado, por enfermedad. Además están renqueantes Chiqui, Suso Martínez, Julio Rey, Manu Táboas y Javi Otero. Demasiadas incidencias y lastre para medirse  a un rival del potencial del Racing, que viene además de cuajar su mejor partido de la temporada ante el Compostela. El Arosa deberá rearmarse, no solo en cuanto a efectivos, seguramente también en su estilo de juego. Sáez no ha tenido demasiado tiempo esta semana para pensar en las virtudes y posibles puntos débiles del equipo ferrolano, centrando toda su atención en el estado físico de sus jugadores y dándole vueltas a sus opciones para presentar hoy un once lo más competitivo posible. El Arosa no tiene presión. Es cierto que viene de caer en casa con el Bergantiños, pero hizo los deberes en las primeras seis jornadas de liga para afrontar esta parte del calendario, un auténtico Tourmalet en octubre, con cierto colchón. Además contará con el apoyo de su público, que deberá llevarlo en  volandas sobre todo en los momentos delicados del partido para poder dar la sorpresa y tumbar a un gigante.
El técnico de los visitantes, Emilio Larraz, reconoce que la ausencia de Manu Rodríguez puede afectar al Arosa. “Es un jugador que les da equilibro y experiencia, nunca deseas que falte nadie, pero bueno si falta un jugador importante para ellos es menos potencial que tienen, aunque todas las semanas todos los equipos tenemos alguna baja”.
Los racinguistas por contra recuperan a su capitán, Pablo Rey, pero está por ver si el entrenador zaragozano lo utiliza de inicio o en la segunda parte. El Racing llega a A Lomba exigido de su primera victoria a domicilio en liga y respaldado por la buena imagen ofrecida ante el Compostela. “Tras el último partido nos fuimos todos contentos e ilusionados de haber encontrado al fin un camino que nos lleve a donde queremos, el otro día se hizo un fantástico partido y el reto es repetir ese nivel de rendimiento y tener más fortuna para ganar el partido ante el Arosa”, explica Larraz. “Fuera de casa no hemos demostrado que tenemos ese potencial ofensivo, ni tampoco hemos sido consistentes. Es un reto para poder ganar un partido fuera de casa”,  insiste.
El partido es día de club, por lo que los socios del Arosa pasan por taquilla para abonar un suplemento de 5 euros. El público en general pagará 10 euros y se espera un nutrida representación de la afición del Racing, puesto que viajan dos de sus peñas desde Ferrol.