El Céltiga niega insultos racistas al árbitro en un duelo de alevines

El Céltiga niega insultos racistas al árbitro en un duelo de alevines
Aficionados en A Illa en el último derbi entre el Céltigay Arosa en Tercera | g. salgado

El partido de la categoría alevín fútbol 11 que disputaron el domingo por la mañana el Céltiga y el EFB Vilanova en el campo de A Bouza fue suspendido por el árbitro Padierna Quintero en el minuto 50 de la segunda parte por “falta de garantías de respeto, agresiones verbales y gritos racistas” por parte de algunos aficionados, “temiendo por mi integridad física”, según recoge el propio colegiado en el acta.
El árbitro refleja que hubo insultos durante la primera parte por parte de aficionados del Céltiga, y así se lo hizo saber al delegado de campo, al que, según explica en su escrito arbitral, solicitó en el descanso su colaboración para que los aficionados repusieran su actitud.
Según la versión del colegiado, el delegado no se mostró por la labor de hablar con los aficionados, mientras que el utillero local “en una actitud grosera”, le dijo supuestamente que “tú siempre igual, árbitro malo, pita bien”.
El árbitro decidió reanudar el juego “para no perjudicar a los jugadores y otros aficionados que no tienen la culpa”, si bien en el minuto 50 detuvo el partido, “debido a que los insultos a mi persona no cesan y por el contrario toman gravedad racista y xenófoba”. El colegiado colombiando dice que le gritaron “eso no es fuera de juego, árbitro burro, macaco, extranjero de mierda vete para tu tierra”. En ese momento “informo al delegado de campo que el partido queda suspendido por falta de garantías, porque él como delegado no tuvo la actitud de colaborar a poner orden, por el contrario se mostró reacio a hablar con los aficionados y llamar a la Guardia Civil”.
Por último, el árbitro escribe que con el partido ya suspendido, el coordinador de la base del Céltiga, Luis Carro, “de forma educada” fue a su vestuario a pedir explicaciones de lo ocurrido, también el presidente Ramón Rial, que según el árbitro le dijo que “nosotros hacemos todo lo posible para que los aficionados se comporten bien, hasta ponemos carteles, ¿pero que quiere el Comite de Árbitros, que nosotros nos enfrentemos a los seguidores?”

Versión del club
Lo cierto es que la versión del árbitro poco tiene que ver con la que aportan desde el Céltiga. El delegado de campo se negó a firmar el acta en desacuerdo con lo escrito por el trencilla. La directiva advierte que va a recurrir cualquier sanción al respecto y muestra su malestar con este colegiado con el que se produjeron problemas en partidos anteriores.
El coordinador de la base Luis Carro considera que “lo que cuenta no es verdad”. Carro no estaba en el partido, pero se presentó en la instalación cuando el colegiado decidió detener el juego. “Yo hablé con él al final y le dije que debió avisar a las fuerzas del orden para que identificara a esa supuesta persona que lo insulta. A mí los presentes me dicen que no hubo insultos racistas. Nosotros somos los primeros que estamos en contra de este tipo de cosas y ponemos todos los medios, con charlas a los padres, normas en los campos...”.
Desde el Céltiga aseguran que en ningún momento el árbitro pidió al delegado la presencia de las fuerzas del orden y reiteran que “nosotros no vamos a enfrentarnos con ningún padre, hay un protocolo que debió seguir, suspender el partido solo encendió más los ánimos”. Desde el club lamentan que “esto mancha nuestra imagen y nos hace mucho daño”.

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