Devoción al derbi desde el extranjero

Borja Pérez y Jorge Fole son buenos amigos. Separados por la distancia. A sus 28 años forman parte de los numerosos arousanos en la diáspora, buscándose la vida lejos de España. Trabajan en Londres y Budapest, desde donde esta noche seguirán por televisión el derbi gallego por excelencia entre Depor y Celta. Con la misma pasión y rivalidad de siempre. Como si estuvieran en Riazor, porque como explican, ese sentimiento tan especial que desprende el partido no entiende de fronteras.
Jorge es socio del Celta desde hace una década. Miembro de la Peña Dani Abalo. El futbolista vilagarciano, amigo de ambos, verá “o noso derbi” desde Turquía, milita en el Sivasspor. Jorge es supervisor de eventos en los museos Tate de Londres, donde lleva dos años y medio. “Mi madre y mi hermana me cosen a mensajes cuando juega el Celta y estoy trabajando” comenta entre risas. Borja se pasó los dos últimos años lejos de Vilagarcía acabando sus estudios. Ahora lleva siete meses en Budapest trabajando en el departamento de cuentas de IBM. Miembro de la Peña deportivista Perla de Arousa, reconoce que “seguir al equipo desde la distancia se lleva con más nervios que estando en casa, aunque este año reconozco verlo más tranquilo que las dos últimas temporadas”. Los resultados son mejores.
¿Por qué se hicieron seguidores acérrimos de los dos grandes gallegos? “Es un sentimiento que no se puede explicar” comentan los vilagarcianos, que pese  a su juventud han podido disfrutar bastantes derbis. Borja recuerda con una sonrisa un buen puñado de partidos. “Los dos de Segunda (gol de Lassad en A Coruna y de Borja en Vigo), el 0-5 en Balaídos con hattrick de Víctor Sánchez (hoy entrenador) y el 1-0 con gol de Djalminha el día del pique con Mostovoi”. A Jorge el Celta también le ha dejado recuerdos imborrables contra el Depor. El primero que disfrutó in situ fue “el 2-1 de la temporada 2000-2001 remontando con goles de Djorovic y el Zar en 10 minutos”. También rememora la penúltima victoria en liga en Riazor, “ese día estaba Borja también en el estadio”. Además habla del pleno de la pasada temporada “les ganamos los cinco enfrentamientos”, y es que entre estos equipos no hay amistosos, “siempre gusta ganar el derbi”. 
Los dos amigos vilagarcianos entienden la fuerte rivalidad de forma civilizada. “Espero que sea un derbi sin incidencias” explica el celtista, “que se parezca cada día más al vasco y poder llevar algún día a mi sobrino a Riazor como le prometí, sin tener miedo a que le pase algo”.  En la misma línea se pronuncia el deportivista. “Cuando las cosas vienen torcidas, el eterno rival suele ser el primero en animarte, por eso deseo un derbi en Primera como el de este sábado durante muchos anos”.
Jorge echa de menos “no poder ir al estadio con los amigos”. Hoy verá el partido con dos celtistas, “un compañero también de Vilagarcía y mi novia”, rodeados  de amigos ingleses. “El fútbol aquí es como la religión, eso sí, todas las categorías posibles inglesas y luego lo internacional. Es admirable como se llenan los estadios de lo que sería Segunda B en España”. 
Las redes sociales y la telefonía móvil, a través sobre todo del what’s up, les permiten interactuar durante el partido con aficionados y amigos. También entre ellos. “En Hungría lo veré en un bar. No será difícil. Están locos por la Liga y emiten prácticamente todos los partidos, así que será en un bar con mis amigos, a los llevo tiempo explicándoles el significado de este partido para ambos equipos y la historia y rivalidad que conlleva”.
En su pronóstico Borja aventura “un partido bonito, vistoso y con goles”, argumentando que “los dos equipos vienen haciendo buen fútbol y creo que es un buen momento para disfrutar de un derbi en unas circunstancias menos parecidas a la última década y que recuerde un poco más, salvando las distancias, a los de los 90 y principios de los 2000”. 
Jorge visualiza un choque de estilos. Entre “el poder ofensivo del Celta y la organizada defensiva deportivista”. Le preocupan la baja de Cabral, “hay que ver como se repone el equipo de los 5 goles encajados en el ultimo encuentro”, y “frenar a Lucas” porque “está en un momento fantástico”. 
Al margen del diferente estado de ánimo al final de los 90 minutos, ambos arousanos encajarán con deportividad el resultado, deseando suerte al rival con la intención de vivir el partido en el futuro en competición europea para sentirse más orgullosos si cabe de sus raíces y su devoción al derbi.