El alma celeste del Villalonga

El alma celeste del Villalonga
equipo juvenil que dirigen borja burgos y santi que está cuajando una sensacional temporada en la liga gallega

El Villalonga se ha ganado a pulso el reconocimiento de todo el fútbol gallego. Que una parroquia de unos 2.000 habitantes se esté codeando en Tercera División con ciudades como Pontevedra, Ferrol, Vigo, A Coruña y Santiago tiene un enorme mérito, así como ser desde hace ya unos cuantos años ser el equipo de referencia en O Salnés. Sin duda alguna su primer equipo es uno de los grandes orgullos de la villa, pero no el único. Están las fiestas de San Pedro, por supuesto, pero también la cantera celeste, el alma del Villalonga. Tener un equipo en esta exigente Tercera División se lo pone muy difícil a los canteranos, de ahí que apenas salgan futbolistas de la base que puedan dar el salto al primer equipo. Y más teniendo en cuenta las dificultades que tiene el club para tener equipos de cierto nivel en la cantera. Y es que la competencia es enorme y apenas hay margen para conseguir jugadores, más allá de la propia parroquia vilalonguesa. Y es que en un radio de 10 kilómetros a la redonda están Noalla, Portonovo, Sanxenxo y Dena con canteras similares.

Y pese a todas las dificultades en el Villalonga trabajan cada día más y con mayor seriedad con los jóvenes, aumentando cada año el número de licencias –esta temporada rondan los 115 jugadores repartidos en ocho equipos–. La joya de la corona son los juveniles, que tras el ascenso militan en la Liga Gallega y están realizando una gran campaña, incluso con serias opciones de meterse en la fase de ascenso. Martín González Chaves, el ahora responsable de la cantera celeste, al que prestan una gran ayudan Antonio Folgado y Manuel Fernández, cree que de este equipo van a salir algunos futuros jugadores del primer equipo, aunque es evidente que en Preferente tendrían más opciones que en Tercera División.

La esencia es la formación, que los niños se lo pasen bien y también que hagan deporte, sin olvidar la competitividad a partir de una cierta edad.

El alma celeste del Villalonga

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