Un penalti en el 88 condena a un pobre Arosa en ataque

Un penalti en el 88 condena a un pobre Arosa en ataque
Futbol Tercera Vilalbes vs Arosa /

Cuando no se puede, no se puede. Es algo que debió pensar Piscis ayer en Vilalba, donde el Arosa perdió 1-0 con un gol de penalti en el minuto 88 y sufrió un nuevo contratiempo en forma de lesión. Esta vez fue Rivas, que dejó el campo a la media hora renqueante debido a una contusión en su rodilla derecha, cuyos daños conocerá en las próximas horas. El Arosa no fue capaz de acercarse con peligro y claridad a la meta del Rácing Vilalbés. Sin argumentos en ataque en un terreno de juego espectacular, amplio y en buen estado, al Arosa no le quedó otra que trabajar mucho para contener al rival y defender el empate inicial. El equipo hizo un encomiable esfuerzo, apoyado en la solidaridad, el orden táctico y la seguridad que trasmite el portero Jorge Pérez. Pero al final una acción bastante polémica y absurda, ya que el balón toca en el brazo de Vixo tras un despeje de un defensa en una jugada sin ningún tipo de peligro, condenó a la derrota a los arlequinados, la cuarta en los últimos cinco encuentros.
De inicio se vio a un Vilalbés demasiado respetuoso con su rival. A los locales les debió intimidar la clasificación del Arosa, porque en los primeros diez minutos esperaron replegados en su campo. El Arosa movía el balón con paciencia,  tratando de encontrar grietas en la disposición del rival, que no aparecían. El Vilalbés perdió el temor a dejar espacios a su espalda al cuarto de hora, se estiró y empezó a llegar al área de Jorge. Las primeras aproximaciones fueron en dos saques de esquina bien solventados por el equipo vilagarciano, que estuvo arropado en un tarde fría y desapacible en la capital da Terra Chá por una veintena de seguidores.
Óscar Martínez a centro de Álvaro protagonizó la primera ocasión. Su disparo se fue alto. El Vilalbés presionaba muy bien en banda tanto a Eloy como Nando, sabedor de que el potencial ofensivo de los de Piscis pasa en estos momentos por las galopadas de ambos. Jonathan, en la media punta, estuvo participativo pero sin mordiente, mientras que Hugo no fue capaz en ningún momento de asustar a la zaga local, que tuvo uno de sus partidos más plácidos esta temporada, como comentaban sorprendidos sus propios aficionados en la grada.
Mediada la primera parte la desgracia volvía a cruzarse en el camino del Arosa. Rivas se lesionó en su rodilla derecha tras un encontronazo con un rival. El Arosa jugó con diez unos minutos y el Vilalbés dispuso de su mejor oportunidad, en un córner que lanzó Poratti y el central Borja Prieto remató de cabeza a la parte superior del larguero. Tras los intentos del rianxeiro por volver, el Arosa hizo el cambio. Entró Vixo. Los locales apretaron aprovechando el desconcierto del Arosa tras el nuevo varapalo en forma de lesión. El  Vilalbés lanzó varios córners seguidos (cinco en apenas dos minutos). Al Arosa le tocó apretar los dientes y resistir. El arreón lucense se vio cortado primero con un percance en el tobillo izquierdo de Borja, que no fue a mayores, y luego con el golpe que  se llevó Óscar Martínez, que le dejó aturdido unos instantes. Tras los parones nada cambió. El Vilalbés llevaba totalmente la iniciativa y el Arosa era incapaz de estirarse y pisar área contraria.
Al filo del descanso el Vilalbés tuvo otra buena ocasión en un balón que Jorge, muy valiente y atento, quitó con una estirada a los pies de Álvaro. Lo mejor que le pudo pasar al Arosa fue la llegada del descanso. De nuevo el ánimo del equipo se veía tocado al ver a Rivas yéndose del banquillo hacia el vestuario con hielo en la rodilla y cojeando de forma ostensible. Un nueva incidencia en la plaga que les asola esta temporada.
La segunda parte empezó con mejor cariz para el Arosa. Jonathan probó suerte con un disparo desde fuera del área que se marchó por encima del larguero. El Vilalbés no esperó mucho para introducir al talentoso Justino en el terreno de juego. De sus botas nació un envío sobre la carrera de Poratti por la derecha, el centro de primera lo remató Nico en el primer palo a las manos del meta. El partido tenía más ritmo y estaba más abierto, pero pronto se vio que las acciones del Arosa en ataque morían lejos el área.
Los locales reclamaron penalti por una caída de Nico a la hora de partido. Vixo y Martín se lanzan al suelo y evitan el tanto, aunque parece que en falta. Los aficionados locales se encendieron, algo que luego influyó y pudo mediatizar al final en la mano involuntaria de Vixo que el árbitro sí castiga con la pena máxima.
En el 63 Jorge respondió a un lanzamiento de falta de Borja. El Arosa tuvo su opción en el 75. En un pase en profundidad sobre Hugo que le permitió entrar en área en carrera en un uno contra uno con el defensa Borja, pero el delantero del Arosa, en otro ejercicio de inoperancia,  no logró superarlo. El Vilalbés se fue echando para arriba en el tramo final. A falta de menos de un cuarto de hora, Piscis introdujo a Munín en lugar de Jonathan. El santiagués se situó en medio campo junto a Vixo y Jesu adelantó su posición.
El Vilalbés siguió volcado y ganó profundidad con los cambios, mientras al no le duraba el balón y era incapaz de contragolpear. Los visitantes se limitaban a aguantar el empate.  Jorge Pérez, empecinado en lograrlo, evita el gol con una extraordinaria parada de reflejos a remate de Borja. Pero en el 88 llegó el penalti por mano de Vixo en un centro desde la izquierda, toco Martín y el balón dio en la mano de su compañero. Justino no falló. Fue un duro pero justo castigo a un pobre Arosa en ataque.

Un penalti en el 88 condena a un pobre Arosa en ataque

Te puede interesar