Los retrasos en el pago desatan una crisis interna en el CD Boiro

Los retrasos en el 
pago desatan una crisis interna en el CD Boiro
Los jugadores del CD Boiro están preocupados por la situación económica | gonzalo salgado

Los retrasos en los pagos han desatado una crisis interna en el CD Boiro, con la plantilla muy molesta y preocupada ante la situación económica del club. Mientras el presidente David Places niega que exista ningún problema, el entrenador guarda silencio y no quiere hacer declaraciones al respecto, mientras que los jugadores están molestos tras marcharse de vacaciones navideñas sin cobrar la nómina de noviembre.
La situación no es puntual, ya que el equipo ya ha pasado por momentos delicados en lo extradeportivo meses atrás debido también al retraso en los pagos. Y es que una gran parte de la plantilla viaja desde diferentes ciudades gallegas durante la semana para entrenar en Boiro, lo que supone una serie de gastos elevados a los que tienen que hacer frente. Cierto es que las retribuciones que reciben los futbolistas son de las más altas de la categoría, pero la incertidumbre se ha instalado en el vestuario tras comprobar que desde el club no se están cumpliendo las promesas del plazos de pago. Algún jugador medita solicitar la baja a su regreso de vacaciones la próxima semana.
El presidente, por su parte, envía un mensaje a la plantilla sobre el rendimiento deportivo, ya que habla de la última derrota en Ribadumia e invita a los futbolistas a hacer autocrítica. La próxima semana será clave con el regreso al trabajo, puesto que la crisis puede mitigarse si llega el pago.

Bien posicionado
A pesar de que el CD Boiro confeccionó la plantilla bastante tarde y se mostró muy irregular en el inicio de liga, al sumar un único punto en los tres primeros partidos, ha logrado crecer en solvencia y en su juego para sumar 32 puntos en 16 jornadas que le permiten mantener una proyección de play-off. Aunque es séptimo en la tabla, a 4 puntos del cuarto, ha cerrado la primera vuelta con solo 3 puntos menos que hace dos temporadas, cuando de la mano también de José Luis Lemos se proclamó campeón de liga con 77 puntos y acabó ascendiendo a Segunda B.
El Boiro fue capaz ya en la primera vuelta este año de encadenar una racha de cinco victorias seguidas, por lo que espera mejorar sus números en la segunda parte de la temporada para poder disputar la tercera fase de ascenso de su historia a la categoría de bronce del fútbol español. De sus ocho primeros partidos en el nuevo año 2018, cinco de ellos serán ante rivales directos de la parte alta.

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