El Ribadumia pone fin a su mala racha

El Ribadumia se ha reencontrado con la victoria poniendo fin a una racha de cuatro jornadas consecutivas perdiendo que ha generado muchas dudas en el club. Coincidencia o no, lo cierto es que el Ribadumia ha vuelto a ganar cuando Changui ha vuelto a marcar. El delantero marcó el segundo y definitivo tanto en una gran acción individual al inicio de la segunda parte.
El Ribadumia vence pero no convence. Ni siquiera a su entrenador, que reconoce el mal juego de su equipo. Y es que al equipo le falta chispa. Es blando defensivamente en todas las parcelas del campo, dejando demasiado tiempo para pensar al rival, y es extraordinariamente impreciso con la pelota, cuando se le presupone cierto talento para la combinación. Pero al menos ganó, que ya es bastante tal y como estaban las cosas.
La primera parte es mejor pasarla de puntillas y rescatar únicamente los dos goles. Y es que tampoco hubo más. En el minuto 19 Sylla remató de cabeza un balón enviado por Óscar Guimeráns desde el córner. 1-0 y un poco de calma. El Laracha le dejó la pelota al Ribadumia y este no supo demasiado que hacer con ella. Padín buscaba las internadas por su banda y poco más. Y ya cerca del descanso, primer acercamiento del Laracha al área rival, falta de Pacheco al borde y golazo de Óscar.
El Ribadumia de la segunda parte fue mejor. Tuvo más iniciativa ofensiva. Tenían balón y trataban de llevarlo a la portería rival, aunque no siempre con acierto. Changui marcó pronto y después de ese gol pudieron venir unos cuantos más. El Ribadumia monopolizó el juego y las ocasiones llegaban de forma continuada. Changui, Óscar Guimeráns, Óscar Río, David Pérez, Sylla, Miguel... Todos ellos pudieron marcar pero no lo hicieron y dejaron vivo al Laracha, que ante esa tesitura decidió buscar el empate en el último cuarto de hora. Lo hizo a trompicones, pero casi le sale bien. En una buena acción individual Taibo no marcó porque lo impidieron las yemas de los dedos de la mano izquierda de Javi Sánchez. Taibo metió el susto en el cuerpo de una afición que ya se temía lo peor, aunque finalmente los tres puntos se quedaron en Ribadumia. Tres puntos que permiten a los de Gabi Leis seguir soñando con una cuarta plaza que está más abierta que nunca. Los aurinegros visitarán la próxima semana al colista Bertamiráns. Un triunfo les devuelve a la pelea.