El Ribadumia se regala una merecida alegría en la última jugada

Un gol de Fran Fandiño prácticamente en la última jugada del partido dio ayer una justa victoria al Ribadumia en A Senra ante el Pontellas. Un resultado que sitúa al equipo de Luis Carro sexto en su grupo con 11 puntos. Necesitaba ganar el conjunto aurinegro para certificar las buenas sensaciones en el juego que venía desplegando y lo necesitaba también porque llevaba cinco jornadas sin hacerlo. El 1-0 despeja cualquier duda, si bien el resultado pudo haber sido mucho más amplio, ya que en la primera parte el Ribadumia desperdició varias ocasiones muy claras con Charles como protagonista.

Repitió el técnico local el dibujo 1-4-4-2 en rombo en mediocampo. Carro dio descanso a Monchito, con molestias, pero esta vez sí tuvo alternativas buenas y sanas en el banquillo para meter una marcha más en la segunda parte. El Pontellas, que sigue colista y sin ganar, apenas inquietó a Roberto Pazos en el primer tiempo. Fue el Ribadumia el que dominó, generando situaciones claras en ataque combinado y transiciones rápidas. 

El mejor jugador del Pontellas fue el portero Aarón Puente. El ex del Vilalonga salvó por dos veces sendos remates a bocajarro de Charles, y también le ganó la partida en un mano a mano al brasileño en el primer tiempo. Lo cierto es que Charles estuvo en casi todas las opciones locales, pero no tuvo suerte. A centro de Fandiño dispuso de otra muy clara. El propio Fandiño y también Brais rondaron un gol que mereció el equipo local en la primera parte. Pero la realidad fue que el Ribadumia se fue al descanso con la intraquilidad de que el marcador no reflejaba sus méritos de nuevo.

El Pontellas trató de dar un paso al frente en la segunda parte, pero salvo una falta directa lanzada por el central Rubén que no cogió puerta al equipo de José Curiel le costó generar ocasiones de gol. El Ribadumia trató de subir el ritmo de ataque con la entrada de Álex Fernández y fue con el triple cambio mediada la segunda parte al entrar Santi, Dieguito y Óscar Martínez, cuando los locales volvieron a la ofensiva total. 

Fueron numerosas las llegadas al área visitante por banda, pero siguió faltando la definición y mejor decisión dentro del área para finalizar tantas llegadas. Ya en el tiempo de aumento fue Óscar Martínez el que arrancó en conducción hacia adelante para filtrar un pase interior sobre Fran Fandiño, que en el mano a mano definió con mucha calidad picando el balón lo justo sobre la salida abajo de Aarón. El visitante Samu vio dos amarillas por sus protestas, pero ya no hubo tiempo para más. A última hora el Ribadumia logra un triunfo que refuerza su ánimo y su buen trabajo, y lo más importante, le sitúa con 11 puntos en mitad de la tabla después de 8 jornadas y a la espera de visitar el martes al Bouzas y el domingo al Arosa.