10º-22º
miércoles | 24 abril | 2024
El Portonovo durmió esta noche en la tercera plaza, empatado con el Areas, después de ganarle ayer a un Atios que queda fuera de la lucha por el ascenso.
Fue un duelo de estilos. Mientras el Portonovo trata de elaborar mucho más las jugadas, mezclando el juego, el Atios apuesta prácticamente siempre por iniciar con un balón largo buscando a su hombre alto referencia en ataque, Tomás, y a partir de ahí hacer jugada ya en tres cuartos de campo. Recurso que mezcla con el contraataque. Lo que no quieren es la pelota cerca de su defensa, muy lenta, a la que ayer Ricardo Fernández quiso incomodar con la presencia del rápido y escurridizo Manu Sieiro.
No se impuso ninguno de los dos estilos en una primera parte equilibrada, aunque se le veía más cómodo al Atios, mejor posicionado y con las ideas más claras. De hecho fue el equipo que más veces llegó con peligro al área rival, aunque la verdad es que se jugó poco en las zonas de peligro. Tomás fue el primero en disparar a puerta (minuto 7) atajando Marcos bien colocado.
El Portonovo se rompía por momentos en dos bloques y el defensivo tenía problemas con las contras visitantes. Una pérdida de Suso en mediocampo se convirtió en una buena opción del Atios pero le faltó acierto en el último pase. La mejor acción ofensiva del equipo visitante en la primera parte llegó a la media hora de juego, con finalización de Jacobo con un disparo que se fue rozando el palo.
No estaba nada cómodo el Portonovo y para colmo se lesionó Muñiz, pero el fútbol es imprevisible y en cualquier momento pueden cambiar las cosas. Nacho, que había desaprovechado en el 39 una buena ocasión en un remate de cabeza en el área, no perdonó a la segunda. El centrocampista local se encontró con un regalo de Curiel, ayer de central. El ex del Portonovo le entregó en bandeja el balón en un pase horizontal al borde del área y Nacho se lo agradeció marcando el primer gol ante la salida de Miguel.
El Portonovo de la segunda parte fue un equipo más agresivo, buscando el robo de balón y la salida rápida a la contra. Pudieron sentenciar Melchor y Bolo pero quien lo hizo fue Alex Cubas, aunque él solo tuvo que empujar la pelota al fondo de la portería después de que Manu Sieiro se la entregase en bandeja en una acción en la que sacó a relucir su velocidad tras recibir un pase interior magistral de Suso.
El Atios de la segunda parte incluso apostó más por el fútbol directo sumándose Curiel al ataque junto a Tomás, y tras quedarse con diez el equipo local por expulsión de Nacho, arriesgó su técnico cerrando con defensa de tres y metiendo a toda la gente de refresco. Pero nada le sirvió. Fue un tramo final más abierto de lo que debiera pero el triunfo local no corrió peligro.
