Una victoria con doble mensaje

¿Pero dónde esta Taylor? se preguntaban los que veían calentar al Xuven sin el escolta cubano, el máximo anotador del equipo. Pues apartado por indisciplina grave. Una situación que parecía poner extraordinariamente complicada la victoria. Y es que uno de los problemas del Xuven esta temporada está siendo encontrar un buen ritmo anotador. Y sin Taylor ese obstáculo se agrandaba aún más. Pero el equipo ganó. Una victoria que envía un par de mensajes nítidos a todo el mundo. Principalmente a los propios jugadores, pero también a la afición. Primero que el equipo está por encima de todo. Un valor este prioritario en baloncesto y en cualquier deporte de equipo y que, por desgracia, está en declive en la actualidad, donde el dichoso Balón de Oro parece más importante que cualquier título colectivo. El segundo mensaje es que más allá de la ausencia del máximo anotador, lo que realmente ha diferenciado el juego del Xuven y ha sido su gran activo para llegar hasta aquí es su defensa. Una defensa que ayer sacó a relucir contra un rival que, precisamente, destaca por ser un buen equipo en el apartado ofensivo. Los 46 puntos en los que se quedaron los abulenses es el dato del partido. Cierto que el Xuven arregló su marcador en el último cuarto, pero dejar a un equipo en esta liga por debajo de los 50 es un éxito defensivo monumental.

Una victoria y dos mensajes claros que seguramente permitan crecer al equipo a partir de ahora. Y una victoria que cierra una semana especialmente tensa que el club fue llevando en secreto para que no se ampliasen los efectos sobre la preparación del partido.

Sin Taylor en el equipo y con Aksel Bolin ya más fuera que dentro porque el de ayer era su último partido –se marcha a Noruega por motivos laborales–, hay dos jugadores que salen especialmente beneficiados. El primero es Emilio Oubiña, que gana en minutos y en responsabilidad. Pero sobre todo sale beneficiado Tim Whitwhort. El alero estadounidense llegó para sustituir a Ramljak y para ser el tirador del equipo. Y quiere asumir ese rol pero le estaba costando. Ahora el equipo necesita sus puntos como el comer. Ya jugó casi media hora de partido y sumó 12 puntos. No se corta a la hora de ver aro y solo le falta mejorar su porcentaje de acierto. Ganas de responsabilidad le sobran. Y también compromiso, implicación y buen ‘feeling’ con la grada. Es de esos jugadores que enchufan al público con sus gestos. Pero el líder del Xuven sigue siendo Alberto Rodríguez. El capitán fue pasando desapercibido en la primera parte, pero apareció en la segunda para darle un giro definitivo al partido. También sobre él debe recaer mayor responsabilidad anotadora sin Taylor, pero es que Alberto lleva soportando ese rol desde que llegó al Xuven.

Pero lo que marca la diferencia en el equipo de Yago Casal es la defensa. Y la de ayer fue brillante. Alternando individual con zonas.

El partido arrancó con un parcial de 11-1 pero reaccionaron los abulenses y a partir de ahí se mantuvo igualado. Con ambos marcadores subiendo a cuentagotas. El tercer cuarto fue un tanto caótico, pero le sentó bien a los locales, que abrieron brecha y remataron la faena en el último período, al mismo ritmo que fue creciendo Alberto en el partido.

Y al final victoria y despedida con manteo para Aksel Bolin.