Cómo comparar préstamos y por qué debes hacerlo

Cómo comparar préstamos y por qué debes hacerlo
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Según aseguran los profesionales de la web Loan Scouter, para comparar préstamos debidamente hay que ir un poco más allá de fijarse en el número que representa el tipo de interés nominal.

Por ellos, nos ofrecen varios consejos. Por ejemplo, en vez de usar el tipo de interés nominal, normalmente abreviado como TIN, es mejor usar la TAE. Para empezar, la TAE incluye todas las comisiones que te obliga a pagar la entidad para recibir su préstamo, de modo que es mucho más transparente. Además, anualiza el interés, de tal manera que puedes comparar préstamos con diferentes vencimientos, por ejemplo, préstamos de 3 meses, con préstamos de 6 meses.

Junto a la TAE hay otro valor esencial que se debe tener en cuenta en las comparaciones: la cantidad total a devolver. La TAE nos deja saber qué préstamo es más barato o caro de forma relativa. Es decir, si tuviese un plazo de un año, pero no nos dice la cantidad total a pagar. Esta cantidad debe aparecer en el contrato de préstamo y debemos tenerla en cuenta.

Otro factor que debemos considerar son los requisitos que nos piden las entidades. En primer lugar porque si no los cumplimos, no nos concederán el préstamo, pero también porque cumplir requisitos como presentar una garantía o un aval, puede abaratar bastante el servicio.

Por el contrario, requisitos como tener que contratar una cuenta nómina, supondrán un gasto a mayores y hay que valorar si realmente merece la pena a cambio de la rebaja en el tipo de interés.

Un asunto importante son las comisiones y tarifas por servicios no obligatorios. Estas comisiones no se tienen en cuenta para el cálculo de la TAE porque solo se pagan si ocurre una condición. Por ejemplo, puede que el préstamo tenga una comisión por cancelación anticipada, por extensión del plazo de préstamo o por compensación por los avisos que tengan que darnos si cometemos un impago. En principio, podemos pensar que no tendremos que pagar estas cantidades, pero la vida da muchas vueltas, así que es mejor conocerlas bien antes de estampar nuestra firma en el contrato.

En cuanto a por qué debes invertir tiempo en comparar préstamos antes de decidirte por uno, las repuestas es muy sencilla: puede hacerte ahorrar dinero y disgustos. Dinero porque con la comparación podrás elegir préstamos con tipos de intereses y comisiones más bajos y disgustos porque la mera comparación hará que entiendas mucho mejor el servicio y sus condiciones, de modo que probablemente tenga como resultado que tomes mejores decisiones.

A día de hoy, hacer estas comparaciones no es tan tedioso como hace años. Para un primer filtrado, se pueden usar comparadores financieros como el mencionado Loan Scouter. A continuación, cuando tengamos unos pocos candidatos y queramos hacer comparaciones más exhaustivas, lo mejor es acudir a la web oficial del proveedor y buscar un modelo de contrato. Si no lo encontramos, los respectivos servicios de atención al cliente deberían tener la capacidad de enviárnoslo.

Por supuesto, hacer esta investigación previa, no hace que una vez tengamos el contrato real, no debamos leerlo. El contrato definitivo es, sin duda, el documento más importante a leer en nuestra comparación y las referencias obtenidas durante la investigación, nos servirán para evaluarlo mejor.

Cómo comparar préstamos y por qué debes hacerlo

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