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sábado | 20 abril | 2024
Los partidos constitucionalistas intercambiaron llamadas a la unidad y reproches en el acto unitario de SCC, donde el ex primer ministro francés Manuel Valls avsió de que tras el 10N solo cabe la unidad y la portavoz del PP en el Congreso, Cayetana Álvarez de Toledo, criticó al PSC y a Cs.
Societat Civil Catalana (SCC) celebró un acto para conmemorar las manifestaciones por la unidad de España de los días 8 y 29 de octubre de 2017 en Barcelona en el que participaron representantes del PP, Ciudadanos y el PSC, además de Valls.
Las figuras políticas congregadas hicieron diversos llamamientos a “la unidad del constitucionalismo” y mostraron orgullo por lo logrado en aquellas manifestaciones de 2017 a favor de la unidad de España, las primeras movilizaciones masivas de esta índole efectuadas en Cataluña.
Valls llamó a retomar ese espíritu y alertó de que “tras las elecciones del 10N no habrá mayoría” y “la única posibilidad” que quedará será “la unidad del constitucionalismo”: “No hay otra vía, no hay otras alianzas”, afirmó.
“Ni rojos, ni azules”
El ahora concejal por Barcelona dijo que en España “no hay ni rojos ni azules, ni iglesias que arden, no hay franquismo”, y indicó: “Tenéis que uniros, imaginar el futuro pactando, dejar de descalificar a los demás”.
Añadió asimismo que “aquí no hay ni bandas ni trifascistas, hay hombres y mujeres que deben unir sus fuerzas porque los catalanes y el resto de españoles lo necesitan” y, ovacionado por el auditorio, hizo hincapié en la necesidad de apostar por “pactos de Estado”, por el “sentido común”, la “altura de miras” y la “voluntad de pactar”.
Álvarez de Toledo, en su turno, aprovechó su intervención para reprochar a los socialistas que no apoyen la moción de censura contra el Govern que se debatirá el lunes en el Parlament y a Cs que rechace concurrir bajo las siglas de España Suma en los comicios del 10N.
La dirigente popular lanzó un mensaje “para los apáticos y los astutos”, a quienes ha avisado de que “el constitucionalismo debe ser una política, no una emergencia”, y dijo que los partidarios de la unidad de España deben “cambiar de actitud cuanto antes”, ya que a su juicio esas manifestaciones de 2017 fueron “fuegos artificiales en una larga noche de desistimiento” tras la cual volvieron “los cálculos y la flacidez”.
El presidente del grupo de Cs en el Parlament, Carlos Carrizosa, evitó, en su turno, responder a Álvarez de Toledo.
